Bahía Blanca | Viernes, 29 de marzo

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Condenan a un militar que resistió a los golpes un operativo de tránsito

 Leandro Mansilla recibió una pena en suspenso. Uno de los policías atacados sufrió rotura de ligamentos.

Un joven de 23 años que trataba de impedir el secuestro del auto de su padre, que manejaba alcoholizado, fue condenado por resistir a los golpes el operativo desarrollado en Punta Alta y romperle los ligamentos de una rodilla a uno de los policías que intervino.
Se trata de Leandro Ezequiel Mansilla, de 23 años, personal militar, nacido en Ushuaia y domiciliado en Coronel Rosales, quien recibió la pena de un año y 5 meses de prisión en suspenso, es decir que no irá a la cárcel salvo que incumpla las reglas de conducta que se le impusieron durante 2 años.
Al fallo se llegó mediante juicio abreviado, con el acuerdo entre la fiscal Paula Pojomovsky, el defensor particular Francisco Favrat y el propio acusado.
El hecho se produjo poco después de las 6 del 12 de abril de 2015, en Humberto al 400 de Punta Alta, cuando inspectores municipales de tránsito realizaban un control de rutina. Al detener el vehículo Renault Megane, dominio COP 921, determinaron que Mario Mansilla manejaba con exceso en el límite de alcohol en sangre. Iba acompañado por su hijo, un menor y otra persona.
Al ordenarse el secuestro del coche, padre e hijo se pusieron violentos, según el acta de procedimiento. "Si tocás a mi hijo, los mato", dijo el padre, mientras que el hijo les advirtió lo mismo con respecto a su padre.
Los inspectores pidieron refuerzos de la policía, pero los automovilistas no depusieron su actitud y continuaron con las amenazas.
 
Trompadas y patadas
En esas circunstancias el menor de los Mansilla atacó al oficial de policía Hugo Andrés Velázquez, a quien le aplicó trompadas y patadas, según se estableció.
El uniformado terminó con contusiones en la boca y el cuero cabelludo y un fuerte traumatismo en una rodilla, que le causó la ruptura del ligamento cruzado anterior. Y los Mansilla, aprehendidos.
Para el juez en lo Correccional José Luis Ares, a cargo de rubricar el acuerdo abreviado entre las partes, quedó probada la autoría del acusado, en especial por el acta de procedimiento, las declaraciones de los testigos y el informe médico, que daba cuenta de las lesiones graves que sufrió el policía, teniendo en cuenta el tiempo de recuperación.
"Debo aclarar que si bien el procesado Leandro Mansilla se encontraba con algún grado de ebriedad -0,35 g/l-, ello de ningún modo puede llevar a entender que no pudo comprender la criminalidad del acto ni que se haya visto impedido de dirigir sus acciones, pues su accionar fue coherente al pretender evitar el secuestro del automóvil que conducía su padre, al amenazar de muerte a los policías y agredir a la víctima", ratificó el juez.
En consecuencia, recibió una sentencia de un año y 5 meses de prisión de ejecución condicional por resistencia a la autoridad y lesiones graves.  Y como reglas de conducta, durante 2 años, tendrá que fijar domicilio y someterse al control del Patronato de Liberados.
En tanto, Mario Héctor Mansilla, el padre del joven condenado, también tendrá que responder por los delitos de resistencia a la autoridad y lesiones graves.
Se lo juzgará por separado, ya que rechazó el abreviado y decidió ir a juicio oral y público.
Al haber emitido opinión el juez Ares en el caso del hijo, el expediente será girado a la Cámara Penal, que deberá sortear a otro juzgado en lo Correccional para intervenir.