Bahía Blanca | Jueves, 28 de marzo

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¡Aprobado! Un jardín público bahiense incorporó yoga para niños

Los pequeños del Jardín de Infantes Nº 941, de Vista Alegre, esperan las clases con alegría. El proyecto, presentado por la directora Fabiana José y la profesora de Yoga Prashant, Natalia Chuliber, cuenta con el aval de las autoridades educativas.

   Anahí González
   agonzalez@lanueva.com

   Los niños del Jardín de Infantes Nº 941 -de entre 3 y 5 años- aprendieron a esperar los viernes. No se les escapa de la agenda. Y no porque sea la previa del fin de semana: ¡por la clase de yoga! 
 Se sacan las zapatillas felices y las dejan, por un rato, en un costado de la salita.

   Con la guía de la profesora de yoga Prashant, Natalia Chuliber, empiezan a jugar.

   Reconocen animales, imitan sus posturas y sonidos, y hasta crean sus propias versiones de cada una desarrollando la imaginación y la creatividad. Alinean su cuerpo y lo fortalecen, mejoran la concentración y liberan tensiones en los estiramientos.

    Se miran, se escuchan y, sobre todo, se divierten, porque todo ocurre en un ambiente lúdico.

  Fotos: Noemí Muñoz.

   Y, finalmente, hacen silencio, un bien tan escaso en tiempos de tablets, juegos electrónicos, televisores y computadoras. Así aprenden, con disciplina y mediante el juego, a autopercibirse a nivel físico, intelectual y emocional.

    Empiezan a dar los primeros pasos para conectarse con lo más sagrado: con ellos mismos, con la alegría de estar vivos, con el latido de su corazón.

     Ya se ven los frutos

    Es la primera experiencia de este tipo en un jardín de infantes público de nuestra ciudad, avalada y supervisada por las autoridades de Región Educativa 22  (que nuclea a los distritos de Bahía Blanca, Patagones, Coronel Rosales, Monte Hermoso y Villarino) y se  ajustó a los contenidos propuestos por el diseño curricular. 

    Para Fabiana José, directora del Jardín Nº 941 y para la profesora de yoga Prashant Natalia Chuliber, es una gran satisfacción haber podido poner en práctica la iniciativa en mayo pasado.

    Natalia es profesora de Yoga Prashant desde hace seis años, con capacitación en niños y embarazadas. También brinda clases para adultos y Yoga correctivo postural y participa como asistente en la formación de instructores y profesores de Yoga Prashant en el espacio de Yoga Kiran Center. 

   Además imparte Cursos de capacitación de Yoga Kids, dirigido a instructores de Yoga y profesionales de la Salud en Kiran Center.

    “Yoga para niños es una manera divertida de permitirles desarrollar habilidades y potencialidades en un ambiente lúdico. No se compite, somos todos iguales y cada uno trabaja a su ritmo y a su tiempo”, contó.

    En las clases utiliza fichas con dibujos de animales o formas geométricas y elementos como cubos y fichas pedagógicas.

   "Sugiero las posturas, ellos imaginan, las muestran, logran armar un relato y transmitirlo y que el otro los escuche”, señaló.

   Yoga Prashant (prashant significa paz) no solo les permite ser más flexibles y tener un mejor sentido del equilibrio y la orientación sino conocer mejor su cuerpo.

   Al finalizar cada clase la “seño Nati” -como le dicen los pequeños alumnos- les pide que den un abrazo a quien tienen al lado.

   “A veces se rechazan, no se miran o aparece el 'no te conozco' o 'yo a él no lo abrazo'. Creo que a los adultos nos está faltando relacionarnos con los pares y ellos lo perciben y lo expresan. Dar un abrazo, un beso, decir buen día, es fundamental. Preguntar como estás al que tenemos al lado”, señaló.

   “Ellos lo ven. Observan la relación con el par. Si nosotras, como docentes, estamos constantemente dándonos un beso o un abrazo eso se va a transmitir”, dijo.

    También hay un momento de relajación en que no se utiliza música.

   “Solo hay silencio; y el silencio conecta. Esto los ayuda a ver que en la sala también pueden estar en silencio y conectados”, subrayó.

   La directora del establecimiento, Fabiana José, aseguró que en tan pocos meses ya se están viendo los resultados.

   “Algunos niños mejoraron su postura al caminar y han logrado controlar momentos de enojo con respiración y palabras de afecto”, contó la directiva.

   “También los vemos más alegres en las actividades grupales, más predispuestos a integrar. Ya no buscan solo al amiguito de siempre sino a ese otro que en un primer momento no querían abrazar. Nadie queda solo, están todos juntos”, dijo.

   También destacó que mejoró el clima en el jardín, en general, y en cuanto a relaciones interpersonales entre docentes,  y que tanto ella como las maestras y la vicedirectora, Tamara Ezpeleta, cada vez que pueden, se suman a las clases.

   “Las maestras aplican en la sala las técnicas aprendidas en las clases de yoga. Son muy útiles para los momentos en que aparece alguna dificultad o perciben que está por aparecer”, comentó.

    Para la directora del jardín, es un denominador común la falta de calma, de poder expresar los que sentimos, el poder vincularse con el otro desde la palabra o el gesto y no desde el golpe, el empujón o ignorando al que tenemos al lado.

    “Todavía no somos conscientes del significado que tienen las palabras en el otro, sea niño o adulto. Una palabra y la intención que le ponemos, te acaricia o te golpea, te hace feliz o te pone triste. Debemos aprender a usar las palabras”, expresó.

   Cómo nació la idea

   Hace un par de años atrás desde el jardín nació la necesidad de trabajar con todas las instituciones barriales con un fin común: avanzar en aspectos sociales y comunitarios.

   Un día invitaron a los abuelos del Centro de jubilados de Vista Alegre al jardín a hacer yoga con los chicos, quienes ya venían trabajando en Educación Emocional desde la literatura y la filosofía.

   “Fue una experiencia hermosa y muy motivadora. Los vimos a todos muy felices y nosotras ni te cuento”, destacó Fabiana José.

La directora del Jardín Nº 941  explicó el proyecto en la Municipalidad a docentes de nivel inicial y autoridades distritales y regionales junto a Natalia Chuliber.

   “Desde el equipo directivo nos preguntamos ¿y si probamos como es tener Yoga en el jardín? Y acá estamos”, dijo contenta.

Si sos directora o docente de nivel inicial o de escuela primaria y tenés la inquietud de llevar Yoga Prashant a tu institución podés comunicarte por mail a yogaprashantinfo@gmail.com para recibir información.

   La idea era ambiciosa porque querían mantener el proyecto en el tiempo y para ello necesitaban la aprobación de su supervisora.

   “Debíamos incluir a otro profesional en la institución y también explicar los fundamentos del yoga para que los padres comprendieran que no se les iba a enseñar a los niños una religión”, dijo.

 

   Así es como vieron la posibilidad de encuadrar el Yoga Prashant en los contenidos del diseño curricular y también tomando contenidos de ESI desde lo corpóreo, los vínculos y las emociones.

   ¿Que es yoga? 

   El concepto más arraigado es el que lo define como un conjunto de técnicas combinadas para lograr el desarrollo y mejoramiento humano.

   La palabra yoga viene de la raíz sánscrita Yug que significa Unión. Yoga es la unión de cuerpo y mente.  

   Hace 5 mil años ya se practicaba yoga. Al principio los conocimientos se transmitían de persona a persona hasta que con el paso de los siglos se fueron recogiendo en libros que hoy llegan a nosotros.

  El primero en redactar las enseñanzas de yoga fue Patanjali.

   La ciencia del yoga nos ayuda a mantener el cuerpo como un templo al fin de que este se torne tan limpio como el alma. 

   El proyecto se compartió en nuestra ciudad en el 1º Encuentro de Socialización de Experiencias en Educación Inicial Regiones 22 y 23.

   Efectos beneficiosos 

   El yoga para Niños ayuda a calmar y controlar las emociones porque permite eliminar las ansiedades a través del estiramiento y la respiración. Mejora la conducta, la concentración mental y la forma física. 

  •    Mantiene huesos sanos y fuertes y correctamente alineados y músculos flexibles como la plastilina. 
  •    Las posturas de equilibrio mejoran el sentido de la orientación, la agilidad y la estabilidad y concentración. 
  •    Las posturas que llevan nombres de animales y formas geométricas potencian la imaginación el juego, la fuerza y la disciplina. 

   Capacitación. La capacitación específica en Yoga para Niños, es fundamental para que la disciplina se lleve a cabo con conocimientos y profesionalismo.

   Familia. El proyecto se presentó sala por sala a lo largo de ocho reuniones con los padres de los niños. Se les explicó en qué consistía, el fundamento, los contenidos y la periodicidad. 

   Empatía. "La empatía y la educación emocional hay que empezar a trabajarlas desde chicos. Quizás ellos no comprendan el significado de la palabra empatía pero sí saben, cuando se ponen en el lugar de otro, lo qué les gustaría y lo que no", dijo la directora Fabiana José.

   Lo que brinda el yoga

   A nivel físico. Aumenta la flexibilidad y mejora la coordinación de movimientos. Mejora la capacidad respiratoria y ayuda a tomar conciencia corporal. Potencia alineación, concentración y memoria y aumenta la estimulación y la motivación. 



   A nivel Emocional. Contribuye a desterrar miedos nocturnos y a combatir el insomnio infantil. Favorece el control del nerviosismo y la agresividad. Mejora la autoestima, agudiza la personalidad y el carácter. Contribuye a una mejor comprensión e interacción con los demás.

   La clase de yoga empieza cada viernes a las 9.30 y a las  14.30. La frecuencia es quincenal para cada sala. El jardín Nº 941 tiene 8 maestras de sala, dos preceptoras (que además gestionan la biblioteca y la ludoteca) y profesores de Música y Educación Física.