Encontraron baleadas en la cabeza a una policía trans y a una joven dentro de un auto estacionado
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Una efectivo trans de la Policía Bonaerense y una joven de 23 años fueron encontradas en las últimas horas gravemente heridas a balazos en la cabeza, en el interior de un auto estacionado, en el distrito de San Martín.
Si bien las primeras sospechas apuntaban a una tentativa de homicidio y otra de suicidio, las pruebas recolectadas posteriormente giraron el caso a una agresión hacia las víctimas, por lo que se buscaba al autor y el arma utilizada.
El episodio fue descubierto este lunes por la mañana en el barrio Villa Bonich, en la zona noroeste del Conurbano, según informaron fuentes policiales.
Las víctimas son la efectivo trans Patricia Aylén Molina Dolezal que trabajaba en la comisaría primera de San Martín y Victoria Fabro, de 23, quienes fueron encontradas heridas con disparos, ambas en la sien derecha.
Una vez que se presentaron en el lugar efectivos policiales, las víctimas fueron trasladadas al Hospital Castex, donde quedaron internadas.
Si bien había trascendido que las dos personas habían muerto horas después del hecho, fuentes policiales indicaron este martes que ambas se encontraban internadas en terapia intensiva con pronósticos reservados, asistencia respiratoria mecánica, y permanecían estables.
Según las fuentes, en poder de Molina Dolezal, quien estaba de licencia y hace poco tiempo cambió su identidad de género, se encontró una pistola Browning calibre 22 con cartucho en recámara y cinco en almacén cargador, que no habría sido utilizada en el hecho, ya que en el auto se encontraron una vaina calibre 9 milímetros, y un plomo desformado que será peritado.
Además, se informó que no se observó violencia externa en el vehículo, y el auto se hallaba con sus puertas trabadas.
El caso fue caratulado por el momento como "lesiones gravísimas con arma de fuego", con intervención de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N° 5, del Departamento Judicial de San Martín, cuya titular es la fiscal Ana Armetta.
Tanto a Molina Dolezal como a Fabro se les realizó el barrido electrónico en las manos, el que identifica la presencia de pólvora, y el que podría establecer si alguna de las dos disparó. (NA)