Volvieron a robar en un corralón de Malvinas al 3000

Redacción de La Nueva.

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 Casi por una formalidad, Mario Belladonna se presentó ayer en la comisaría Quinta para realizar la denuncia por un nuevo robo que sufrió en su negocio de artículos para la construcción.

 El hombre, de 65 años, está resignado, porque sufrió no menos de diez saqueos en el corralón denominado El Unico, que funciona en Malvinas 3050, y ningún delito fue esclarecido.

 "Obviamente, ahora tampoco voy a recuperar nada", manifestó, con una sonrisa, el damnificado.

 El nuevo ilícito, según la presentación realizada en la comisaría Quinta, se registró entre las 18 del miércoles y las 7 de ayer, cuando el comerciante llegó a la propiedad, que cuenta con pocos vecinos y frondosa vegetación en las inmediaciones.

 Se llevaron tres computadoras, una con monitor a color; dos impresoras; una desmalezadora; una bordeadora; una tijera de cortar hierro; dos cables trifásicos de unos diez metros de largo, y un teléfono inalámbrico, del cual dejaron la base.

 También se llevaron el candado de la tranquera del frente --que fue forzado--, supuestamente para no dejar huellas de la manera en que ingresaron.

 Belladonna calculó las pérdidas en unos 5.000 pesos y dijo que no cuenta con seguro.

En cinco años

 "Entre 2001 y hoy, fácil debemos tener entre 10 y 15 robos, de los cuales debo haber denunciado 3 o 4; nunca recuperé nada", manifestó el hombre.

 El damnificado aseguró que las anteriores causas "siempre terminaron con la famosa nota que se archiva por no encontrar a los responsables".

 Belladonna también se manifestó disconforme con el sistema de seguridad instrumentado para la emergencia de la víspera.

 "Llamé a la (comisaría) Quinta y me dijeron que tenía que llamar al 911 para que vaya un móvil; llamé al 911 y me dijeron que no correspondía a ellos, me lo dijo un operador que se llama Mauro, que es el número 48, para que sea claro", afirmó.

 "Al final, vinieron dos móviles de la comisaría Quinta, a la cual me tuve que dirigir para hacer la denuncia, porque habían tomado intervención", concluyó.

Apareció en Los Chañares un vehículo sustraído

 A las 15 de ayer, en los fondos del barrio Los Chañares, apareció abandonado --sin el equipo de GNC y el tubo de 17 litros-- un Ford Sierra GL blanco, dominio TNJ 280, que había sido robado, durante la madrugada, de una cochera ubicada en Vieytes 2959.

 Un patrullero de la comisaría Segunda, que realizaba recorridas preventivas por las sustracciones de equinos en la zona, dio con el vehículo, que se encontraba en las mismas condiciones, más allá del faltante.

 Poco después se presentaron en el lugar --en Lucía Miranda al 200, a la altura de Vieytes al 6000--Gustavo Martín Viola (32), el damnificado, así como peritos de la Policía Científica.

 Viola, en contacto con un cronista de este diario, comentó que constataron el hecho a las 6.50 de la víspera, cuando se abrió el estacionamiento ubicado a la vuelta de su casa.

 Explicó que los ladrones ingresaron tras forzar una de las chapas del techo, del cual descendieron con una soga.

 "Le sacaron las cuatro ruedas nuevas a una camioneta Toyota, también se llevaron herramientas de una Break Renault 12 y trataron de arrancar un Fiat Duna, al cual le doblaron la puerta", detalló el hombre.

 Como sí pudieron poner en marcha su vehículo, cargaron todos los efectos en el mismo y se dieron a la fuga.

 En la denuncia, formulada en la comisaría Segunda, Viola había estimado en unos 10.000 pesos el valor del rodado.