Bahía Blanca | Domingo, 20 de julio

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Globos de ensayo

Por Ricardo Salas/"La Nueva Provincia".


 Mientras los problemas de Estado siguen subiendo a la superficie, la Provincia se mueve al compás de la música política proveniente de esta especie de obra teatral que animan los principales dirigentes del PJ bonaerense. Los portavoces del duhaldismo desparramaron que habían propuesto al propio Eduardo Duhalde para senador nacional en octubre, buscando superar la interna tácita entre "Chiche" y Cristina Fernández.




 Un vocero dijo que el ex gobernador rechazó la propuesta, pero igual ellos guardan la esperanza de que cambie su decisión. "Necesitamos líderes con la fortaleza de Duhalde", dicen al presentarlo como una "prenda de unidad" indispensable para evitar un enfrentamiento con la Rosada.




 En rigor, la jugada le permitiría a Duhalde neutralizar no sólo el desembarco kirchnerista en la Provincia, sino también frenar el irreversible avance de Kirchner ante su manifiesta pretensión de "plebiscitar" su gestión presidencial en el mapa bonaerense, cuyas riendas institucionales están en manos de Felipe Solá.




 Como Kirchner se siente con derecho a buscar una victoria propia en la Provincia, el duhaldismo anotó como certeza que el presidente seguramente jugará a Cristina. El otro nombre fuerte es el del ministro Aníbal Fernández, ya declarado precandidato a la Gobernación para 2007.




 En definitiva, el duhaldismo se reserva el derecho de armar "una mesa de dos" para acordar la "convivencia" y forzar un acuerdo sobre la confección de las listas de candidatos al Congreso de la Nación. De ese modo, buscan dejar en segundo plano a Solá y lentamente hacer que la "irreconciliable" interna del PJ bonaerense empiece a desinflarse.




 Solá viene hablando sólo de gestión, como se propuso la semana pasada, después de la reunión con Kirchner. ¿Estará obedeciendo una indicación del santacruceño de no hablar más de la interna con el duhaldismo? Curiosamente, hasta su ministro de Gobierno y principal armador del felipismo, Florencio Randazzo, apagó su máquina de lanzar proyectiles verbales contra las huestes de Duhalde.




 Solá había advertido que podría ir por fuera del PJ, aunque la posterior jugada del duhaldismo para instalar con fuerza la postulación de "Chiche" y la reunión con NK terminaron frenando la decisión. Supuestamente, Kirchner le aconsejó a Solá que deje de preocuparse por la interna doméstica. En esa charla, el presidente habría dejado flotando la idea de que insiste con la estrategia de arreglar con Duhalde. Los dichos del gobernador, cuando salió de la reunión con Kirchner --"No me voy del PJ"--, mostrándose dispuesto a conversar con Duhalde, diseminaron todo tipo de interpretaciones.




 El duhaldismo presiona a Solá para que se defina respecto de la convocatoria a internas para cargos provinciales, no sin antes dejar en claro que las candidaturas nacionales se deciden entre Duhalde y Kirchner. Saben que Solá quiere participar sí o sí de esa reunión cumbre "al ras del piso".
El felipismo considera que tiene un espacio ganado con la diferenciación del duhaldismo y la instalación de su postura, pero evalúan que es prematuro definir el espacio electoral, sobre todo porque no está claro si Cristina Kirchner decidirá postularse por Buenos Aires. Por lo pronto, el viernes y el sábado, el felipismo realizará su gran convención en Mar del Plata, donde esperan contar con la presencia de los intendentes y funcionarios provinciales.





 "Que quede bien claro: nunca vamos a ir por afuera del peronismo, que es un movimiento y no una mera herramienta electoral" aclaró el jefe del bloque de senadores del Frente para la Victoria, Juan Amondarain, al justificar la decisión de Solá de despegar de la tradicional estructura del PJ bonaerense.




 Por su lado, piqueteros ultrakirchneristas, que casi diariamente visitan los despachos de la Rosada y vienen trabajando abiertamente con el felipismo, aseguran que "Kirchner ya dio la orden de jugar con Solá". Así lo dejaron trascender en una comida del intendente platense, Julio Alak, con el dirigente piquetero Emilio Pérsico.




 Esa corriente piquetera ya se atribuye haber colocado "hombres propios" en el gabinete del gobernador: Lo dicen en alusión al flamante viceministro de Salud, Neri Fures, nombrado después que Solá y el titular de la cartera sanitaria, Ismael Passaglia, decretaran la cesantía del duhaldista Oscar Fariña.




 El funcionario cesanteado --un médico sanitarista vinculado al peronismo de Avellaneda-- denunció: "Hace unas semanas, Passaglia me pidió que presentara la renuncia, por razones exclusivamente vinculadas a mi participación en el PJ y por no haber adherido a la línea interna del gobernador".
En la Legislatura, hablan del reciente pedido de Duhalde a sus legisladores para que no dejen de apoyar en algunos aspectos las leyes que requiere el Ejecutivo, a fin de que Solá no tenga argumentos de agitar el fantasma que pone en duda la gobernabilidad.





 No obstante, los enfrentamientos entre diputados y senadores del duhaldismo y del felipismo son moneda corriente, pese a la posterior votación de leyes y proyectos que salen con fórceps. La semana pasada, los combates fueron demasiado lejos, pues los recintos de sesiones estuvieron al límite de convertirse en una unidad básica. Como botón de muestra, está el áspero choque, incluidos insultos, entre los diputados Tránsito Saucedo (PJ) y Luis D'Elía (Frente Patria para Todos).




 La amenaza del duhaldismo pasa por dejar caminar el pedido de desafuero que pesa sobre D'Elía por el copamiento de la comisaría 24 de la Boca. El diputado aliado al kirchnerismo respondió dando golpes a la banca mientras desafiaba: "Puedo ser desaforado por ser un luchador social, pero no por chorro ni mafioso ni coimero, como hay muchos en esta Cámara".




 El espacio para la oposición es ínfimo. El radicalismo no logra hacer pie, producto también de su rencilla interna. Hace unos días, Ricardo López Murphy criticó duramente la posibilidad de establecer neolemas expresada por el PJ bonaerense. "Son capaces de todo", disparó el líder de Recrear, en una reunión con dirigentes de partidos políticos, en La Plata. Allí también agitó su postura frentista, aunque sin renunciar a sus convicciones republicanas y sin el mero objetivo de ganar cargos.




 Ahora parecen evaporarse las chances de que el jefe del Paufe, Luis Patti, puede sellar una alianza con López Murphy, ya que podría sumar su fuerza a la de Duhalde, con quien viene dialogando en pos de un acuerdo electoral. Es que el duhaldismo procura fortalecerse con sectores escindidos del PJ, como el "pattismo" o la fuerza de Aldo Rico, quien volvió a escurrirse dentro del andamiaje de la agrupación Lealtad.




 Con motivo del deceso de Juan Pablo II, el gobierno bonaerense suspendió parcialmente la actividad oficial. El gobernador estuvo en Tandil, donde se colocó la piedra fundamental de un hospital de niños, acompañado "por mis ministros tandilenses, que ocupan un espacio casi excesivo y operan permanentemente para Tandil: Magnanini y Mouillerón", afirmó Solá, sin advertir que su jefe de Gabinete también realiza políticamente "intervenciones quirúrgicas en la Sexta".




 A todo esto, el notorio incremento de graves casos de delitos rurales empujó al ministro de Seguridad,
León Arslanian, a reforzar el número de uniformados en el interior bonaerense. Sumó a más de 1200 policías a las patrullas rurales para atacar este flagelo que también aqueja a los distritos del sur.





 La la interna peronista también entorpece el desenvolvimiento del Ejecutivo. Aún está irresuelto el ofrecimiento de mejoras salariales que permita levantar las medidas de fuerza en hospitales y otras áreas sensibles, como es la atención en la justicia. Potencialmente, ese escenario de tropiezos puede también darse en el sector educativo.




 Un tema institucional no menor es la osada propuesta de reformar nuevamente el Código Procesal Penal de la Provincia, esta vez para flexibilizar el régimen de excarcelaciones, como una "solución" a la superpoblación carcelaria. El delicado debate fue planteado por el secretario de Derechos Humanos, Remo Carlotto, al denunciar en un severo informe que en las cárceles hay hacinamiento, déficit en la atención sanitaria y en la alimentación, graves problemas de infraestructura y que persisten las torturas y malos tratos. Llamó la atención que un organismo estatal haya divulgado ese duro cuadro en los penales del intervenido Servicio Penitenciario, que depende del área de Justicia, a cargo del ministro felipista Eduardo Di Rocco.

Ricardo Salas/"La Nueva Provincia"