Satisfacción por la inminente cumbre con Bush

Redacción de La Nueva.

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 BUENOS AIRES (DyN) -- La inminente reunión entre los presidente Kirchner y Bush fue calificada ayer por el gobierno nacional como el cierre del primer tramo de las metas propuestas para su política exterior.

 El canciller Rafael Bielsa, por ejemplo, se mostró complacido y no descartó que el primer ministro británico, Tony Blair, haya mediado frente al líder estadounidense para acelerar la cumbre, que, originalmente, estaba prevista para fines de agosto próximo.

 "Es un corolario de lo exitoso que fue la visita del presidente a Europa", indicó el jefe de Gabinete, Alberto Fernández.

 "Será una reunión con agenda abierta. Eso nos alegra mucho más. Se adelantó la invitación: fue a propuesta del gobierno norteamericano y nosotros la recibimos de buen grado", agregó.

 Bielsa, a su turno, confirmó que la invitación fue cursada por el embajador norteamericano, James Walsh.

 Pormenores. Kirchner partirá el martes por la mañana hacia Washington para, el miércoles al mediodía, entrevistarse con Bush.

 Habrá cumplido, así, con el objetivo de reunirse, en diez días, con cinco de los siete líderes de los países más ricos: el británico Blair, el alemán Schroeder, el francés Chirac, el canadiense Chretien y el citado dirigente estadounidense.

 La comitiva estará compuesta, al menos, por el ministro de Economía, Roberto Lavagna; el titular de la SIDE, Sergio Acevedo, y, probablemente, el gobernador santacruceño, Héctor Icazuriaga. Para delinear la apretada agenda que desarrollará Kirchner, Bielsa se les anticipará.