Bahía Blanca | Domingo, 07 de diciembre

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El sudafricano Otto sorprendió a todos

El sudafricano Hennie Otto salvó con 68 golpes (3 bajo par) el azote del viento en la primera jornada del Abierto Británico de golf, para situarse como líder imprevisto tras la primera jornada. Los argentinos estuvieron parejito: lejos. Los cordobeses Angel Cabrera y Eduardo Romero quedaron en la posición 60, con 75 golpes, mientras que el chaqueño José Cóceres está 70º, con 77 impactos.


 SANDWICH, Inglaterra (EFE) -- El sudafricano Hennie Otto salvó con 68 golpes (3 bajo par) el azote del viento en la primera jornada del Abierto Británico de golf, para situarse como líder imprevisto tras la primera jornada.


 Los argentinos estuvieron parejito: lejos. Los cordobeses Angel Cabrera y Eduardo Romero quedaron en la posición 60, con 75 golpes, mientras que el chaqueño José Cóceres está 70º, con 77 impactos.


 Las pocas letras del apellido capicúa del surafricano quizá le salvaron del disloque que provocó la brisa furiosa. Solamente cinco hombres ganaron al campo.


 Otto, de 27 años, se mostró sólido para conseguir lo más destacado de su carrera, en la que todavía no hay títulos. Un jugador inexperto como él, en su primera vuelta de un Open Británico, logró el mejor resultado en un campo que si algo reclama es experiencia.


 Las cuatro letras de Otto y la normalidad fueron las notas dominantes en los links del Royal St. George inglés. Es decir, el campo presentó su talla estándar: fuertísimo viento; frío y calor; sol y lluvia, un campo repleto de badenes, duro, con greenes rápidos y ondulados, banderas imposibles, golpes ciegos, escasas referencias... En resumen, un horror que se tradujo en una crónica de sucesos.


 Esa horrorosa normalidad fue, al cabo, un rugido que asustó a los favoritos, pero levantó el ánimo a Otto y a los dos golfistas que comparten la segunda plaza: el veterano multimillonario de 48 años y otrora el mejor del mundo, Greg Norman (69 golpes) y el estadounidense Davis Love III, supuestamente deprimido por el suicidio de un cuñado.


 Arrugados quedaron Tiger Woods (73 impactos) y el último campeón del Masters de Augusta, el zurdo Mike Weir (74).


 También fallaron Jim Furyk (74) --último campeón del Abierto estadounidense-- y Ernie Els (78), el sudafricano que defiende el título y al que sólo le supera Tiger en la clasificación mundial.


 El jueves del Open fue, entonces, un día de golpes y favoritos tendidos. De medios golpes para paliar el efecto del viento en las alturas. Fue preciso disparar por bajo, ver la bola rodar y encomendarse al Santo Patrón para que ésta quedase cerca de bandera.


 Woods fue la primera víctima del intenso viento. La primera bola lanzada por el número uno del mundo se fue al rough que cubre hasta las rodillas.


 La posterior labor de búsqueda, a la que se apuntaron al menos 20 voluntarios entre oficiales, árbitros y algún que otro ayudante de cámara, resultó infructuosa. La bola no apareció y Tiger fue conducido de nuevo hasta el tee del uno para lanzar un segundo tiro con penalidad. Total: triple bogey para empezar a hablar.


 "Es la primera vez que me ocurre algo así en mi vida", admitió Tiger, quien no obstante logró 1 bajo par en los 17 hoyos restantes.

Clasificación

Puesto Jugador (País) Golpes
1. Hennie Otto (Sudáfrica)68
2. Greg Norman (Australia)69








 Davis Love III (EE.UU.)69
4. S.K. Ho (San Marino)70



 Fredrik Jacobson (Suecia)70
6. Gary Evans (Inglaterra)71



 Tom Watson (EE.UU.)71


 Fred Couples (EE.UU.)71


 Charles Howell III (EE.UU.)71


 Thomas Levet (Francia)71


 Mathias Gronberg (Suecia)71


 Scott McCarron (EE.UU.)71
60.Angel Cabrera (Argentina)75



 Eduardo Romero (Argentina)75
70.José Cóceres (Argentina)77