Los Jefes de Hogar piden apoyo para festejar el Día del Niño

Redacción de La Nueva.

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 Las 25 personas que integran los talleres del programa nacional de Jefas y Jefes de Hogar que se desarrollan en el barrio Laura requieren el apoyo de la comunidad para poder organizar los festejos del Día del Niño.

 Lo hacen con la intención de ofrecerle un momento de recreación y diversión a la población infantil de ese sector de la ciudad, que en su mayoría pertenece a familias de bajos recursos económicos.

 "Queremos realizar juegos con premios y servir chocolate. Por eso necesitamos que los vecinos colaboren con la entrega de dulces (caramelos, chupetines, masitas), además de globos, cacao, leche y juguetes. En este barrio hay muchos chicos y pretendemos que todos puedan disfrutar a pleno de su día y al mismo tiempo que reciban un pequeño regalo", dijo Mirta Noemí Ogol, coordinadora del grupo que lleva adelante tareas de costura, en la sede de la Sociedad de Fomento Barrio Laura.

 En tanto los trabajos de tejido se realizan en un salón de la Escuela Nº 14 (ubicada en Belgrano al 2000), y los emprendimientos de huerta y realización de bloques se efectúan en predios cedidos por los vecinos del lugar.

 En todos los casos, el producido se destina a las escuelas e instituciones que funcionan en el sector. En tal sentido, Ogol indicó que realizan cartucheras, pantalones y otras prendas de abrigo para los menores.

 "También para ello pedimos telas, con las cuales confeccionamos servilletas y otras prendas que son entregadas a los jardines de infantes o al Hogar del Anciano", mencionó.

Provechosa labor en la huerta comunitaria

 Rubén Antonio López, a cargo de la huerta comunitaria del citado programa nacional, expresó que las verduras obtenidas se derivan a Cáritas Santa Lucía, Frater y a las familias más necesitadas del barrio, y en menor proporción para consumo propio.

 "En esta zona hay mucha gente que necesita ayuda. Y nosotros podemos extenderle una mano con el resultado de nuestro trabajo. Le damos verduras de hojas verdes o tomates", dijo López.

 Comentó que la tarea se inició hace un año, con material donado por la comunidad y, especialmente, por el municipio que entregó semillas merced a un programa del INTA.

 "Ahora necesitamos acceder a herramientas, tales como un pico o una pala, y toda clase de semillas, como de lechuga o zapallo. Tenemos un espacio muy amplio y queremos aprovechar la tierra", señaló.

 Luego comentó que en estos días se podrá cosechar lechuga, rabanitos, achicoria y apio, "y aún quedan muchas hortalizas más que necesitan un mayor proceso de crecimiento".

 Respecto a la provisión de agua, expresó que actualmente el servicio es bueno. "Antes teníamos que traer el líquido porque no contábamos con la prestación en los terrenos baldíos. También compramos mangueras de jardín gracias a la colaboración de la población puntaltense", dijo el encargado del grupo.