Cuando el rugby cruza las vías

Redacción de La Nueva.

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 El rugby es un deporte sin fronteras. Los juegan adolescentes, adultos, "cincuentones", mujeres, comunidades de aborigenes y argentinos ilegales en Italia, por ejemplo. Lo practican profesionales, docentes, desocupados, estudiantes y empresarios y para cada contextura física existe un lugar entre quince disponibles.

 Entre tantas ventajas y mínimas limitaciones para aprenderlo, una idea pegó bien en nuestra ciudad: el rugby se extendió a los barrios periféricos. Es decir, salió del country y del mundo 4x4 para cruzar las vías y llegar a esas calles de tierra donde algunos pibes despeinados andan con un dedo en la nariz y la honda en la mano.

 Por una iniciativa de la Municipalidad, los encargados de enseñanza de la Unión de Rugby del Sur organizarán hoy el primer encuentro interbarrial en la cancha de avenida Alem y Florida, a partir de las 14.30.

 "El rugby se juega con una pelota y ni siquiera son necesarios arcos o haches para jugarlo. Los chicos de los barrios tienen condiciones espectaculares para ser explotadas", afirmó el profesor Atilio Giannoni, uno de los capacitadores.

 "En nuestro caso, estamos abocados a captar jugadores y a difundir el rugby pero hay otros profesores de educación física que enseñan sóftbol, fútbol y gimnasia para la primera edad, por ejemplo", agregó.

 No será un picado barrio contra barrio sino un entrenamiento en común, con camiseta y todo. Habrá adolescentes de Villa Don Bosco, Ingeniero White, Vista Alegre, Hogar del Caminante, Villa del Parque y de la zona del Polideportivo Municipal.

 Los protagonistas llegarán (y volverán a sus hogares) en transportes que pondrá a disposición la comuna y al final del encuentro se les ofrecerá una merienda.

Salir a la cancha. La presentación en el tradicional escenario bahiense será la síntesis de lo aprendido a partir de abril pasado, cuando se comenzó con dos estímulos semanales de una hora y media cada uno.

 "Nos dimos cuenta que los chicos tienen condiciones excepcionales y que no son explotadas por la imposibilidad de acceder a otras disciplinas. En el caso del rugby fue más complicado por el desconocimiento del reglamento o por la falta de gente que lo difunda", afirmó Giannoni.

 Oscar Benvenutto, quien también es docente de Educación Física y colabora en la instrucción, derribó algunos mitos.

 "Una de las causas por las cuales nunca se involucra al rugby a nivel escolar es porque la mayoría piensa que es un deporte inseguro, brusco y de contacto. Y realmente no es así", afirmó.

 Acostumbrados al fútbol, no resultó fácil explicar en los barrios los porqué de la ovalada.

 "Nos encontramos que son proclives a no respetar reglas. Pero en dos meses que estamos trabajando logramos ordenarlos y ellos respondieron con mucho entusiasmo y respeto, que es lo que buscamos desde un primer momento", dijo Raúl Rivas, otro de los "profes" que encaran la iniciativa.

 Si bien está previsto que el roce físico sea mínimo, los chicos contarán con la cobertura del seguro municipal de salud. Como para que todos se queden tranquilos y el rugby también prenda en la periferia.