Consenso para fortalecer el cambio hacia una vida cada vez más sana
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Alimentación y salud, desde una perspectiva enfatizada en la prevención, fue el tema central de la Segunda Convención Regional de Consumidores de la República Argentina, cumplida en la víspera, con la organización de la Cooperativa Obrera y el Círculo de Consumidores, en la Sala 2 del Cinemacenter (Bahía Plaza Shopping).
El tema giró sobre el proyecto de "Prevención con participación comunitaria", a cargo del doctor Marcelo Tavella, director del Programa de Prevención del Infarto en la Argentina, de la Universidad Nacional de La Plata, y del profesor Noël Barengo, de la Universidad de Kuopio (Finlandia).
Funcionarios de áreas de salud y acción social, médicos, bioquímicos, nutricionistas, ingenieros, veterinarios, técnicos en alimentación, profesores de educación física y organizaciones civiles dedicadas a la prevención participaron de las jornadas.
Aceites, una clave
Las enfermedades cardiovasculares representan la mayor carga de salud en los países industrializados y un problema que crece rápidamente en los subdesarrollados. La República Argentina ocupa el cuarto lugar en América, en mortalidad cardiovascular. Es, además, la principal causa de muerte en nuestro país.
¿Qué hacer? Entre las conclusiones del taller con expertos se enfatizó la importancia del reemplazo de ácidos grasos saturados (grasas nocivas) por insaturados (grasas omega 3, 6 y 9).
Esa mofidicación determinará una favorable disminución del colesterol LDL (malo) y de la relación colesterol total/colesterol HDL, considerada importante indicadora de la enfermedad coronaria.
Se recomendó, además, una disminución del consumo de lípidos, fundamentalmente de grasas visibles de origen animal (ricas en ácidos grasos saturados) y de aceites parcialmente hidrogenados.
El ingeniero Eduardo Dubinsky, especialista en grasas y aceites, informó sobre las novedades a nivel internacional en relación al uso de los ácidos grasos Trans en alimentos y las posibilidades que ofrece el aceite de girasol de alto oleico como sustituto eficaz.
Las doctoras Laura Alconcher y Marcela Tombesi informaron sobre las consecuencias que produce la carencia del ácido fólico en la dieta.
Por su parte, los consumidores solicitaron, ayer, generar una ley que estimule las ventajas impositivas a las empresas de alimentos que diseñen nuevos productos sin Trans (aceites parcialmente hidrogenados) o los rediseñen evitando este tipo de ácido graso.
Retomando una ponencia de la Primera Convención Regional de Consumidores, que reclamó al Poder Legislativo una norma que defina la obligatoriedad de adicionar ácido fólico en harinas de trigo y maíz, se indicó que está promulgada desde el 22 de agosto de 2002 por la Ley 25.630, pero aún no se reglamentó.
Por lo expuesto, y dado que científicamente se comprobó que la carencia de ácido fólico en la dieta de vastos sectores de la población acarrea defectos congénitos, tales como deformaciones del tubo neural y anencefalia, en la víspera, las autoridades de la Segunda Convención de Consumidores resolvió solicitar una entrevista en forma directa con el Presidente de la Nación, para que a la mayor brevedad se reglamente la Ley 25.630.
Educar para la nutrición
Un cambio de actitud en la sociedad en general y en los docentes en particular, incluyendo contenidos de conocimientos preventivos necesarios para la formación de hábitos alimentarios, resultó otra de las ponencias que contó con las adhesiones de Eugenia Canu (Guatraché) y Zulema Aguerre de Promencio (General Acha).
Sobre la incorporación en la currícula escolar de nutrición sana, expusieron Julia Rossignol (asesora docente) y Graciela Pezzutti (directora de la Escuela de Agricultura y Ganadería).
Lod diputados Jorge Otharán y Juan Pedro Tunessi se manifestaron acerca de las facilidades impositivas y crediticias para la eleboración de productos saludables y volvieron a peticionar, tal como sucedió durante la primera convención de consumidores, que las Cámaras Legislativas instrumenen tales beneficios con el fin de favorecer la producción de alimentos sanos.
Un fondo nacional para controlar el tabaquismo
El especialista en tabaco y salud, doctor Eduardo Laura, alertó que 50 mil vidas al año se pierden por culpa del cigarrillo en la Argentina. Su ponencia, que contó con el respaldo de Gladys Dufaur (Coronel Suárez), Mabel Martínez (Pigüé), Esther Wels (Saavedra), Alicia Peñaloza (Puan) y Emma Flores (Tornquist),
propuso que se apruebe una ley nacional que contemple la creación de un fondo específico para el control del tabaquismo con el incremento del costo del atado.
La administración de ese fondo deberá ser auditado por una organización no gubernamental reconocida en la prevención del cáncer.
Este programa deberá asegurar a todos los habitantes del país la convivencia en ambientes libres del humo del tabaco y garantizar la absoluta prohibición de la publicidad de cigarrillos en los medios masivos de comunicación.
También precisó en la prohibición de asociar el uso del tabaco con el deporte o la belleza física, ya que, según argumenta, constituye un engaño.
Esta ponencia propone desarrollar programas escolares para evitar que los niños y los adolescentes comiencen a fumar, incluyendo, además, el peligro de las bebidas alcohólicas y las drogas, una dieta adecuada y la actividad física.
El fondo deberá representar no menos del 30 por ciento de lo que recauda el Estado por impuestos al tabaco para poder activar un programa de control del tabaquismo.