Primer y sorpresivo contacto entre Kirchner y Tony Blair
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BUENOS AIRES y LONDRES (Télam y DyN) -- El presidente Kirchner y el primer ministro británico, Tony Blair, mantuvieron anoche un sorpresivo encuentro y acordaron, igualmente, volver a conversar hoy, tras la conclusión de la denominada cumbre de países progresistas.
La soberanía sobre las islas Malvinas y las licencias de pesca otorgadas por el gobierno londinense formaron parte de la agenda, que llevó unos veinticinco minutos de diálogo. La situación derivada de los pedidos de extradición a militares también habría integrado el menú.
La manera de armar el contacto fue poco convencional, según los portavoces de la comitiva argentina.
Tras la cena de recepción realizada en el Penny Hill Park Hotel, de la localidad de Surrey, a 42 kilómetros de Londres, Blair buscó a Kirchner y le reiteró lo expresado durante su saludo al inicio de la cumbre.
El jefe del Estado le relató, a su turno, que él era un hombre de la Patagonia, ex gobernador de la provincia más cercana al archipiélago austral y que, por lo tanto, había vivido muy de cerca el conflicto de 1982.
Según los voceros, también resaltó que avanzar en la conversación sobre la soberanía malvinense resulta una cuestión central para su administración y que la pesca en la zona está generando un desmesurado crecimiento de la economía kelper.
Durante el contacto, de acuerdo a integrantes de la delegación nacional, Blair lucía una sonrisa y asentía con la cabeza. Kirchner también le presentó a Federico Mirré, quien será el próximo embajador en Londres.
Ante la requisitoria del impulsor de la Tercera Vía sobre la necesidad de profundizar en otros temas, convinieron seguir haciéndolo hoy.
Minutos antes, a las 19 hora de Inglaterra --15 de la Argentina--, habían intercambiado saludos protocolares. Los jardines del Penny Hill Park Hotel fueron el escenario elegido por los organizadores.
Kirchner fue el cuarto mandatario en estrechar la diestra de Blair. Durante el apretón, el dueño de casa lo felicitó por su performance electoral y, según el vocero Miguel Núñez, le comentó que aguardaba el momento de dialogar a solas como, poco después, sucedió.
Los dirigentes políticos --el alemán Gerhard Schroeder, el canadiense Jean Chretien, el brasileño Luiz Inacio "Lula" da Silva y el chileno Ricardo Lagos, entre otros-- se dirigieron, luego, a una terraza para tomar las clásicas fotografías de todo acontecimiento internacional y, por último, se sirvió una comida en su honor.
Los sherpa --figura alusiva a los guías del monte Himalaya que aquí cumplen la función de consejeros-- formaron una comisión para iniciar la discusión de los trabajos elaborados por las respectivas delegaciones. La representación argentina correspondió a la primera dama, María Cristina Fernández.
Las deliberaciones se desarrollaron en medio de una estricta vigilancia policial con restringida presencia del periodismo.
La cumbre continuará hoy, desde las 9 hora inglesa --5 de Buenos Aires--, para finalizar a las 14.