Bahía Blanca | Domingo, 07 de diciembre

Bahía Blanca | Domingo, 07 de diciembre

Bahía Blanca | Domingo, 07 de diciembre

Dormir favorece el aprendizaje

La mejor manera de almacenar información en el cerebro es dormir dos horas después de aprender algo nuevo. Así lo sostiene en equipo de científicos de la Universidad de PENSYLVANIA (Estados Unidos). Luego de experimentar con ratones, los expertos notaron que aquellos a los que se les permitía dormir inmediatamente después de haber sido entrenados en una tarea específica, recordaban mucho mejor "la lección" que los que permanecían despiertos durante varias horas.


 PENSYLVANIA (Télam-SNI) -- La mejor manera de almacenar información en el cerebro es dormir dos horas después de aprender algo nuevo. Así lo sostiene en equipo de científicos de la Universidad de PENSYLVANIA (Estados Unidos).


 Luego de experimentar con ratones, los expertos notaron que aquellos a los que se les permitía dormir inmediatamente después de haber sido entrenados en una tarea específica, recordaban mucho mejor "la lección" que los que permanecían despiertos durante varias horas.


 Los científicos también llegaron a la conclusión de que las primeras cinco horas que siguen al momento del aprendizaje resultan cruciales, ya que durante dicho período la nueva información es almacenada en la memoria.


 Sin embargo, los ratones privados del sueño cinco o diez horas más tarde del momento del aprendizaje no sufrieron alteración alguna.


 "La consolidación de la memoria ocurre en las primeras horas que siguen al aprendizaje de una nueva tarea y ciertos procesos celulares ocurren en momentos específicos", señaló el doctor Ted Abel, director del equipo de investigación.


 La falta de sueño en las siguientes cinco horas parece afectar a la orientación espacial y el reconocimiento del lugar físico, conocido como memoria contextual.


 Los resultados sugieren que el sueño afecta a la memoria, ayudando a regular la actividad en la parte del cerebro llamada hipocampo.


 Por otra parte, el dormir resultó ser crucial en otras funciones físicas y mentales.


 Según el doctor Abel, el sueño desempeña un papel clave en una serie de funciones físicas y psicológicas, como por ejemplo en la conservación de la energía o en la estimulación del sistema inmunológico.