Condenado a seis años y medio de cárcel
Una pena de seis años y seis meses de prisión le impuso la justicia local a un individuo responsabilizado de consumar dos asaltos, a punta de pistola, en sendos comercios de nuestra ciudad.
El fallo recayó en Juan José Bustamante (23), quien fue sentenciado por el voto de los doctores Hugo Alberto De Rosa, Mario Lindor Burgos y José Luis Ares --quien actuó como subrogante-- del Tribunal en lo Criminal Nº 1.
Al sujeto se lo relacionó, en principio, con el atraco registrado el 25 de marzo de 2002, a las 13.30, en el quiosco de Coulin 1117, donde, mediante el empleo de un revólver, amenazó a una empleada para despojarla de 600 pesos y un paquete con treinta tarjebus de 1,80 pesos cada uno.
"No llamés a la policía, porque sino vuelvo y te quemo", le advirtió el ladrón a la joven, para luego retirarse en dirección a Don Bosco.
El otro delito se cometió el 3 de abril del mismo año, a las 8.10, en el interior del local Agostina, de Enrique Julio 1169.
Allí, mediante la misma modalidad, fue intimidado su propietario, con quien se hallaba una beba, siendo robados 50 atados de cigarrillos de diferentes marcas, una mochila de tela plástica azul y 50 pesos y patacones.
Los magistrados adhirieron al planteo del fiscal de juicio, doctor Pedro Munguía, y rechazaron la postura de la defensora oficial, doctora María Graciela Cortázar, quien sostuvo que su asistido no había tomado parte en los delitos.
La autoría "no admite, a mi entender, duda alguna y se demuestra con las constancias procesales introducidas y producidas en la audiencia de debate oral", manifestó el doctor De Rosa, con el acuerdo de sus colegas.
En ambos casos, como elemento de prueba vital, se tuvieron en cuenta los reconocimientos que, de Bustamante, realizaron las víctimas de ambos hechos, tanto por fotos como personalmente.
"Los dichos de los mencionados testigos resultan tan contundentes, que no hacen vislumbrar fisura alguna en sus relatos que pudieran teñir de duda o incertidumbre lo acontecido", agregó el tribunal.
Mintió. Respecto de los dichos del acusado, el tribunal entendió que no fueron sinceros, en su infructuoso intento por superar el trance judicial.
En cuanto a los supuestos apremios ilegales a los que, según denunció, fue sometido en la comisaría Quinta, los magistrados señalaron que surge del informe médico de la causa que, al momento de ser revisado por el médico forense Rubén Florencio Flores, el procesado "no presentaba lesiones externas agudas o clínicamente evidenciables".
"Destaco también, como elementos que hacen a mi convicción sincera, las coincidencias existentes entre los dos hechos bajo juzgamiento", dijo De Rosa.
En ese sentido, destacó el fallo la descripción del arma realizada por los dos damnificados, la moto de baja cilindrada empleada para la fuga, el modus operandi y los reconocimientos.
Antes de llegar a la parte resolutiva del fallo, se computó como atenuante su falta de antecedentes, mientras que, a modo de agravantes, se citó la extensión del daño causado, la naturaleza de la acción y, en el último hecho, la pluralidad de partícipes, ya que Bustamante no actuó solo.
También se mencionó la peligrosidad puesta de manifiesto al exhibir el arma y apuntar con ella, bajo amenaza de muerte, a las víctimas y haber martillado la misma en uno de los atracos.
Por tal motivo, se le impuso a Bustamante la pena de seis años y medio de cárcel, acusándolo de robo calificado reiterado, en los términos de los artículos 166 inciso segundo y 55, del Código Penal.
Escándalo. A los gritos, con evidentes muestras de disgusto, recibieron tres familiares de Bustamante el resultado del fallo, que le fue leído al imputado en la prosecretaría del Tribunal en lo Criminal Nº 1, ubicada en el tercer piso del Palacio de Justicia, durante la mañana de ayer. El escándalo se produjo en uno de los pasillos, cuando las mujeres tomaron conocimiento de la condena. La tensa situación fue superada con la intervención de los guardias del edificio.