Kicillof inauguró 240 nuevas plazas del Servicio Penitenciario Bonaerense
Están ubicadas en Campana, Lomas de Zamora y La Plata. Ya se prevé la construcción de otras 10 mil.
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El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, inauguró hoy 240 plazas para alojar a personas detenidas en distintas unidades del Servicio Penitenciario Bonaerense. El acto se realizó en Campana, junto al ministro de Justicia y Derechos Humanos, Julio Alak, y la directora provincial de Coordinación de Alcaidías Departamentales, Paula Montero.
“Así como sucedía en materia de educación y salud, nuestro sistema penitenciario también necesitaba una reforma que abordara cambios estructurales y destinara grandes inversiones en el marco de un plan de largo plazo”, sostuvo.
Estas 240 nuevas plazas se habilitaron en la Alcaidía Departamental de Campana, con 72 espacios; otros 120 corresponden a un nuevo pabellón de la Unidad Penitenciaria N° 58 de Lomas de Zamora; y 48 instaladas en la UP N° 26 de Lisandro Olmos, La Plata.
El mandatario afirmó que “estamos llevando adelante una transformación profunda e histórica del sistema penitenciario bonaerense” y recordó que en los últimos dos años se construyó el doble de plazas que las que se habían creado durante el gobierno de María Eugenia Vidal, “en los que se agravó la superpoblación”.
“Con el sistema de alcaidías, estaremos en condiciones de reemplazar, cerrar y clausurar los calabozos de las comisarías, que no están preparadas para brindar las condiciones que requieren los detenidos para reinsertarse socialmente y emprender una vida fuera del delito”, aseguró.
En el marco del Plan de Infraestructura Penitenciaria se construyeron 2.200 plazas en los últimos dos años y se proyectan inversiones para la creación de cuatro unidades penitenciarias de mil plazas y 15 alcaidías con capacidad para alojar cada una a 300 personas privadas de su libertad.
Estos nuevos espacios incluyen ámbitos educativos y de formación laboral destinados a mejorar la reinserción social y disminuir la tasa de reincidencia, en tanto que al reducir la cantidad de detenidos en las comisarías también aumentará la presencia policial en la vía pública para la prevención del delito.
“Apenas finalice este plan, comenzará otro destinado a construir 10 mil plazas nuevas, alcanzando en poco tiempo el 50% de todo lo que se hizo en 200 años de historia”, explicó Alak, quien subrayó que “este plan implica un cambio estructural y de paradigma que permitirá sustituir la presencia policial en comisarías al cuidado de los presos por presencia en la vía pública para la seguridad ciudadana preventiva”.