Bahía Blanca | Martes, 23 de abril

Bahía Blanca | Martes, 23 de abril

Bahía Blanca | Martes, 23 de abril

Daniel Lagostena quedó detenido por el caso Soriano

La Policía Bonaerense aportó nuevas pruebas a la causa. La joven tenía 30 años y dos meses de embarazo. Se especula que podría haber sido cremada. El sospechoso declaró ayer.

A más de cinco años de la desaparición de Erica Soriano detuvieron a Daniel Lagostena, quien era su pareja en ese momento y según la familia de la joven, el principal sospechoso de haber cometido un crimen.

Lagostena, de 54 años, fue detenido en su casa de la localidad bonaerense de Lanús, donde convivía con la víctima.

Fuentes judiciales informaron que la medida fue ordenada por el juez de Lomas de Zamora Gabriel Vitale, a pedido del fiscal Gerardo Loureyro, “por el delito de homicidio y aborto en contexto de violencia de género”.

El operativo fue realizado por el Grupo Elite de la Policía de la Provincia de Buenos Aires.

El abogado de la familia Soriano, Marcelo Mazzeo, confirmó que la detención se produjo “en las últimas horas tras una extensa investigación que realizó la Policía Bonaerense”.

“Se hizo una investigación espectacular. Siempre tuvimos pruebas más que suficientes para demostrar que él fue el autor del crimen”, indicó Mazzeo.

La joven de Lanús, Erica Soriano, quien al momento de su desaparición tenía 30 años y dos meses de embarazo, fue vista por última vez el 20 de agosto de 2010.

Lagostena ya estuvo detenido por este caso, pero la Cámara de Apelación y Garantías en lo Penal de Lomas de Zamora dispuso su liberación al sostener que no habiéndose encontrado el cuerpo de la joven no se podría establecer que Soriano estuviera muerta y que faltaban pruebas para determinar su responsabilidad en el hecho.

Al surgir nuevas pruebas, la Justicia ordenó nuevamente la detención de quien fuera la pareja de Soriano.

La historia

El 20 de agosto de 2010, la joven regresaba a su casa junto con su pareja de una consulta médica con un ginecólogo por su embarazo.

Ella intercambió mensajes con una amiga a quien le contó detalles sobre la consulta médica y fue el último contacto que se tuvo de Soriano con vida.

Ahora de la investigación surgió que mientras la pareja se dirigía a la casa, alguien realizó una llamada desde esa vivienda, situación que incorpora a un nuevo sujeto a la escena de la desaparición.

Se constató que Lagostena se comunicó en seis oportunidades con un familiar durante esa madrugada.