Cuarto caso confirmado de zika en nuestro país
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Una mujer de 21 años se convirtió en la cuarta persona infectada con el virus zika del país cuando se le confirmó el diagnóstico en la provincia de Mendoza después de un viaje que realizó a Colombia.
Cuando la joven llegó a Mendoza presentó síntomas (fiebre y vómitos) por lo que fue internada en el Hospital Español donde fue estabilizada y los médicos le confirmaron que su vida no corría peligro.
Se le aplicó el protocolo establecido para los casos de dengue pero luego los estudios corroboraron que padecía otra de las enfermedades que transmite el mosquito Aedes aegypti: el zika.
El virus zika, transmitido a los humanos por mosquitos, produce por lo general afecciones leves, pero ahora hay serias sospechas de que esté relacionado con una malformación congénita y posiblemente otros problemas de salud, informó el ministerio de Salud provincial.
Oscar Sagas, subsecretario de Salud de Mendoza, confirmó el caso y dijo que al cabo de un tratamiento, la paciente no tendrá problemas para quedar embarazada y no arriesgar a su bebé a un cuadro de microcefalia.
Sagas precisó que, dentro del protocolo, las autoridades sanitarias contactaron a todas las amigas que habían viajado con la paciente infectada desde la localidad de Guaymallén a vacacionar en Colombia, pero ninguna presentó síntomas.
“Confirmamos que las amigas de la paciente nunca han tenido el virus en la sangre. No han presentado ningún tipo de síntoma, por lo que no hay riesgos de que propaguen la enfermedad en Guaymallén”, dijo el funcionario mendocino.
Hay otros dos casos de la Capital Federal infectados por el virus Zika de pacientes provenientes de Colombia, y otro caso en la provincia de Córdoba.
El ministro de salud de Córdoba, Francisco Fortuna, fue quien confirmó ese caso de Córdoba, que se trata de un mobre de 68 años de El Durazno, quien habría viajado a Venezuela y al regresar se le detectó el virus.
Intimación de la ONU
La ONU instó a los países afectados por el virus del Zika, probable causante de graves malformaciones congénitas, a poner a disposición de las mujeres métodos anticonceptivos y a autorizar la interrupción de los embarazos.
“¿Cómo pueden esos países pedirles a las mujeres que eviten quedar embarazadas, pero no ofrecerles (...) la posibilidad de impedir los embarazos?”, se preguntó la portavoz de la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Cécile Pouilly, en referencia a legislaciones restrictivas en países de América Latina donde el virus del Zika se propaga velozmente.