La estudiante no estaba drogada ni alcoholizada
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La joven estudiante de 17 años fallecida este martes en la habitación de un hotel de la ciudad de Bariloche, en pleno viaje de egresados, no había consumido alcohol ni fármacos, según determinó la autopsia realizada ayer a su cuerpo.
El juez de Instrucción Ricardo Calcagno había dispuesto que durante esta jornada se practicara la autopsia al cuerpo de la estudiante en la morgue del hospital zonal Ramón Carrillo, para determinar las causas del deceso.
Los estudios preliminares de la autopsia determinaron que el cuerpo de la joven no presentaba rastros de ingesta de alcohol ni de fármacos.
Sus compañeras de colegio, ya habían comentado que la joven era muy tranquila y que no bebía.
Además, el magistrado a cargo de la causa había ordenado que al cuerpo de la víctima se le realice una tomografía computada y un estudio histopatológico completo sobre los tejidos para conocer si existieron golpes.
Tras completarse todos los estudios, el juez dispuso este miércoles que se le entregue el cuerpo a la familia.
La adolescente manifestó malestar por la tarde cuando se encontraba junto a sus compañeras por lo que de inmediato los responsables del hotel llamaron al servicio de urgencias médicas.
Los padres de la menor de edad viajaron en avión a esta ciudad para interiorizarse sobre las causas del deceso por lo que esperaban conocer desde la Justicia el resultado de la autopsia.
La adolescente concurría al colegio Elicagaray de Gonzales Chaves y había viajado a Bariloche para festejar el fin de curso con una de las empresas que se ocupan del turismo juvenil y que también facilitó el traslado de sus padres.
Las compañeras de la estudiante declararon ante la Justicia con el sistema de Cámara Gesell, mientras los compañeros fueron asistidos por equipos de contención psicológica.