Bahía Blanca | Jueves, 25 de abril

Bahía Blanca | Jueves, 25 de abril

Bahía Blanca | Jueves, 25 de abril

Existe temor por una tercera erupción del volcán Calbuco

Río Negro, Neuquén y Chubut siguen en estado de alerta pese a la mejora temporaria de las condiciones en la zona norte de la Patagonia. Agencias NA y DyN
San Martín de los Andes es una de las ciudades más castigadas por las cenizas. Toda la actividad está limitada y se toman precauciones.

El volcán Calbuco, ubicado en el sur de Chile, volvió a emanar cenizas ayer y complicó el panorama para las ciudades cordilleranas de Río Negro y Neuquén, dos provincias que se encuentran paralizadas desde el jueves.

Las autoridades decidieron la suspensión de clases en toda la zona afectada por nube de cenizas que, a partir de la acción del viento, se dispersó hacia el noreste y llegó al centro del país, incluida la ciudad de Buenos Aires.

Si bien por la mañana las localidades más castigadas por el fenómeno pudieron volver a ver el sol a partir de la dispersión de las cenizas, las noticias que llegaron desde Chile no son alentadoras.

El Servicio Nacional de Geología y Minería del país trasandino indicó a primera hora del día que ayer se reactivó la emanación de cenizas en el volcán Calbuco, y que, según sus informes, es probable que en las próximas horas ocurra una tercera explosión “de grandes proporciones” en el macizo.

Si estas previsiones son ciertas, y teniendo en cuenta las condiciones meteorológicas, la situación en las localidades argentinas más cercanas al macizo sigue siendo compleja.

Por esta situación los aeropuertos de Bariloche, Neuquén y Chapelco, en San Martín de los Andes, permanecen cerrados por tiempo indeterminado a raíz del material que permanece en suspensión.

Por lo pronto la estación aérea de Esquel es la única alternativa para aquellos que tienen que ingresar o salir de la región, y que por el momento tienen permitido llegar por la Ruta 40 a El Bolsón y Bariloche.

El gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, y el senador Miguel Pichetto, que se encuentran enfrentados políticamente, decidieron limar sus asperezas ante los extraordinarios acontecimientos y conformaron un Comité de Emergencia que ratificó el asueto para todas las áreas administrativas de Gobierno en la región cordillerana y la suspensión de clases en todos los niveles.

Si bien los vecinos de Bariloche se encuentran en su mayoría refugiados desde la tarde del miércoles, la jefa comunal María Eugenia Martini volvió a pedirles que eviten salir de sus casas, permanezcan abastecidos de agua y alimentos, y que no circulen con sus vehículos por las calles para que no se levante la ceniza caída.

Por su parte, Neuquén permanece virtualmente paralizada por la suspensión de actividades administrativas en las ciudades afectadas, el cierre de la mayoría de las rutas del centro y sur de la provincia.

Las cenizas llegaron a la capital neuquina ayer por la tarde y de inmediato el Ministerio de Educación provincial decretó la suspensión de las clases en todos los niveles educativos y en todo el territorio provincial.

La actividad en la ciudad más poblada de la Patagonia mermó sustancialmente y muchos comerciante decidieron por su cuenta cerrar sus locales.