“Creatividad y libertad” para el próximo Sínodo
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Agencias EFE y NA
El Papa Francisco clausuró ayer con una misa en la plaza de San Pedro el Sínodo extraordinario de los obispos sobre la familia y destacó que fue "una gran experiencia" de unión, al mismo tiempo que pidió "creatividad" y "libertad" para la próxima asamblea del mismo tema en 2015.
La homilía de ayer le sirvió al Papa para reafirmar "que la Iglesia es llamada con premura a hacerse cargo de las heridas abiertas y a devolver la esperanza a tantas personas que la perdieron".
Francisco aseguró que el Sínodo, que debatió durante 2 semanas temas relacionados con la familia, "fue una gran experiencia" vivida con "sinodalidad" y "colegialidad".
Francisco dio gracias a Dios "por el don de este Sínodo y por el espíritu constructivo con que todos han colaborado".
Y pidió que "el Espíritu Santo, que en estos días intensos nos concedió trabajar generosamente con verdadera libertad y humilde creatividad, acompañe ahora, en las Iglesias de toda la Tierra, el camino de preparación del Sínodo Ordinario de los Obispos del próximo mes de octubre de 2015".
"Sembramos y seguiremos sembrando con paciencia y perseverancia, con la certeza de que es el Señor quien da el crecimiento", concluyó.
El documento final que aprobaron el sábado los llamados "padres sinodales", los obispos con derecho al voto, contenía propuestas para la acogida a los homosexuales, pero no todos los puntos consiguieron la mayoría de 2 tercios que se requirió en las votaciones anteriores.
No obstante, el Papa quiso que el documento, también con los 3 puntos que no alcanzaron la mayoría, fuera publicado por completo, para continuar el debate, a pesar de las divisiones, en el próximo Sínodo.
Entre ellos, el punto 52, en el que se proponía estudiar un camino penitencial para que los divorciados que se volvieron a casar pudiesen recibir los sacramentos, fue el que más votaciones en contra tuvo, pero finalmente fue aprobado por 104 votos a favor y 74 en contra.
La mayoría también aprobó, aunque hubo 62 votos en contra, que "los hombres y las mujeres con tendencias homosexuales deben ser acogidos con respeto y delicadeza" y que se "evitará cualquier marca de discriminación".