Bahía Blanca | Jueves, 28 de marzo

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“El simulacro fue positivo y se cumplieron las expectativas”

El secretario de Atención y Orientación al Ciudadano de la Provincia, doctor Gustavo Ferrari, aseguró que el futuro de la justicia tiene relación con el juicio por jurado.
Un gran realismo tuvo el ensayo de juicio por jurado llevado a cabo en el Palacio de Justicia.

Totalmente positivo resultó para sus organizadores el simulacro de juicio por jurado que se realizó en el transcurso de esta semana en la ciudad y que contó con la presencia del doctor Gustavo Ferrari, a cargo de la secretaría provincial de Atención y Orientación al Ciudadano, quien destacó que con estas pruebas se comienza a elaborar la democratización del Poder Judicial.

“El simulacro fue por demás positivo y se cumplieron las expectativas que tenía la Defensoría del Pueblo, que es un organismo de la Constitución de la provincia de Buenos Aires, que tiene por objeto defender y promover derechos; en este caso con la premisa de promover la participación ciudadana en la administración de justicia”, explicó Ferrari al término del ensayo que se llevó a cabo en la sala de audiencias del quinto piso del Palacio de Tribunales, en Estomba 34.

Doce personas especialmente elegidas para esta experiencia debieron definir el veredicto ante un caso ficticio en el que se juzgaba a una mujer imputada de matar a su marido de un disparo, alcanzándose un importante grado de realismo apoyado por la intervención de actores e integrantes del Ministerio Público Fiscal y la Defensoría General Bahía Blanca.

“Este sistema permite que la gente o el pueblo pueda establecer si alguien es culpable o no del hecho que se le imputa. Nos interesaba llevarlo a cabo en Bahía; creemos que dimos un paso importante y en poco tiempo este sistema comenzará a funcionar con total normalidad”, expresó el funcionario.

El juicio por jurado está contemplado en la Constitución como una garantía para los habitantes.

Básicamente consiste en una forma de juzgamiento en el que un grupo de vecinos debe decidir sobre dos cuestiones fundamentales: si el hecho bajo análisis realmente existió y si el encausado es culpable.

Después de la audiencia de debate, conforme lo que señala la ley, el jurado debe deliberar en un lugar aislado –-en el simulacro se realizó en otra sala del Palacio de Justicia-- y decide acerca de las cuestiones mencionadas. Para un veredicto de culpabilidad se necesitan al menos diez de los votos de los doce integrantes.

Una vez terminada la deliberación, el presidente del jurado, en nombre del pueblo, comunica al juez la decisión a que se ha llegado.

Si el acusado es declarado inocente, el veredicto es obligatorio para el magistrado, con lo que se pone fin al juicio, y si es culpable, corresponde al juez establecer la pena a imponer.

“La gente se compromete en los distintos roles. Es muy positivo percibir el interés del público, que mantuvo su atención durante más de tres horas y hasta tomó partido de la decisión. En síntesis, el futuro de la justicia tiene relación con el juicio por jurado”, enfatizó Ferrari.