Tenencia de drogas: 4 años y 2 meses de cárcel

Redacción de La Nueva.

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A la pena de cuatro años y dos meses de prisión fue condenado un sujeto acusado de tenencia de drogas con fines de comercialización.

El fallo fue resuelto por el juez del Tribunal en lo Criminal Nº 3, doctor Eduardo d'Empaire, quien halló autor penalmente responsable del delito investigado a Néstor Daniel Sánchez (53), quien se encuentra detenido en la Unidad Penal 4.

El magistrado consideró demostrado que el pasado 14 de febrero, poco después de las 18, efectivos policiales que se aprestaban a allanar un comercio ubicado en la calle Brown al 1600, perteneciente al procesado, fueron informados que el sujeto se estaba retirando del lugar, motivo por el cual, teniendo en cuenta que registraba pedidos de captura y paradero, lo interceptaron en la vía pública y le incautaron un teléfono celular.

Luego se requisó el negocio, sin encontrarse elementos de interés para la investigación. Pero cuando los agentes estaban a punto de marcharse, un hombre que estaba en el lugar y que a simple vista se mostraba “nervioso y shockeado”, manifestó a los preventores que “no quería meterse en problemas” y les entregó un bolso que Sánchez le había dejado antes de irse.

En dicho elemento los policías incautaron un atado de cigarrillos que contenía cuatro envoltorios con poco más de 3 gramos de cocaína cada uno, una balanza digital, una pistola calibre 9mm y 7.618 pesos.

Posteriormente, durante el allanamiento de una vivienda en Manuel Molina al 1600, se encontraron más teléfonos celulares, un freezer en desuso y otra balanza.

Según constancias del fallo, el fiscal Eduardo Zaratiegui consideró demostrada la tenencia de droga con fines de comercialización, por parte del encausado, mientras que el defensor Sebastián Martínez, cuestionó la acusación y agregó que, eventualmente, debía calificarse el hecho como tenencia de estupefaciente para consumo personal.

Pruebas de cargo

El individuo que estaba en el local del acusado al momento del procedimiento, declaró en el juicio y afirmó que aquel día estaba trabajando en su taller mecánico, ubicado a pocos metros del negocio de Sánchez, y que su vecino le pidió que se lo atendiera un rato, que volvería rápidamente, y le dejó un bolso del cual debía sacar dinero si llegaba algún proveedor.

Poco después de alejarse Sánchez, llegó una comisión policial y le preguntó si él era el dueño, respondiendo negativamente y contando lo que había sucedido.

Sostuvo que los agentes abrieron el bolso que dejara el imputado y pudo ver que en su interior había dinero, un arma, facturas, papeles y un atado de cigarrillos, dentro del cual observó un envoltorio de polietileno.

Agregó que en la comisaría le volvieron a exhibir los elementos y presenció cuando realizaron la prueba química sobre la sustanciada incautada.

Durante la instrucción de la causa, Sánchez declaró y admitió haber dejado a una persona encargada del local para ir a comprar un repuesto, aunque negó que el bolso incautado le perteneciera.

Sin embargo, el juez D'Empaire señaló que en base a la prueba reunida, se encontraba probada la existencia del estupefaciente en el lugar allanado y la tenencia del mismo con fines de venta.

Además del resultado de la requisa, el magistrado tuvo en cuenta el abandono intempestivo del comercio por parte de Sánchez, quien habría sido alertado por un policía acerca del inminente operativo en el lugar.

“Considero que las probanzas conducen hacia la indudable conclusión de que el imputado tenía la droga para su comercialización. Ello puede derivarse de distintos indicios que, merituados en conjunto y armónicamente, determinan con claridad la decisión a la que arribamos”, expresó.

Finalmente, mencionando como agravante una condena anterior que le fuera impuesta al sujeto por la justicia de Trenque Lauquen, por robo calificado, dispuso sentenciarlo a cuatro años y dos meses de prisión.