Bahía Blanca | Sabado, 20 de abril

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Los depredadores sexuales acechan las redes: ¿hay forma de detectarlos?

Una experta en criminología explica algunas características de estos delincuentes, que se hace pasar por niños en las redes sociales en busca de abusar sexualmente de menores. Pablo Pascual / ppascual@lanueva.com
Los depredadores sexuales acechan las redes: ¿hay forma de detectarlos?. Seguridad. La Nueva. Bahía Blanca

El aprovechamiento del anonimato, una personalidad perversa y la vulnerabilidad de las víctimas.

Un cóctail que siempre es peligroso y que en la redes sociales encuentra un ecosistema perfecto para la aparición de depredadores sexuales.

¿A quiénes apuntan? Por supuesto, antes que nada a los menores, para quienes muchas veces la redes sociales se convierte en firmes telas de araña imposibles de sortear.

“Son depredadores reales”, describe María Laura Quiñones Urquiza, una destacada profesional diplomada en Criminología, Criminalística y Derechos Humanos, y especialista en técnicas de perfilación.

Explica:

“Estos depredadores son personas que tienen cierta predisposición a la violencia o al abuso de menores”.

Quiñones Urquiza, autora del libro “Rastros Criminales”, explica también que “el anonimato es un factor de riesgo criminológico.

"En esas circunstancias, las personas actúan con mucha más libertad y se dan licencias para hacer cosas que no harían mostrando su verdadero nombre y cara”.

Control parental

Agregó que Internet es un medio en el que esta situación se produce, convirtiéndose “en un factor de riesgo para los menores".

¿Qué pasa con el control de los padres? Dice que debe existir, aunque no es garantía.

"El chico también puede crear otras identidades sin que su padre lo sepa”.

Perfiles perversos

En cuanto a la detección de estos depredadores, Quiñones Urquiza considera que estudiar el perfil real que utilizan en una red social es menos efectivo que analizar las falsas.

“Esos perfiles (los falsos) te permiten entender el método de aproximación con los menores y cuáles son los diálogos. Nos va a decir poco sobre sí mismo la cuenta que lleve su nombre”, aclaró.

Rebeldía

Por otra parte, las víctimas de este tipo de delincuentes resultan ser menores que se encuentran “en un estado de vulnerabilidad, como suelen tener los chicos cuando transitan la adolescencia. Es un momento de rebeldía, en el que no están conformes; es un momento de hipersusceptibilidad”.

“Ese estado emocional es aprovechado por estas personas. Seguramente ese individuo le da al chico lo que en ese momento siente que necesita, es decir, comprensión y aceptación".

"De todas formas --explica--, hay casos en los que los menores son extorsionados para encontrarse con el agresor”.

Incomprensible

Más adelante mencionó que “ellos (por los chicos) no tienen la maldad del otro. Pueden tener picardía, pero no la capacidad de hacer daño que tiene el agresor”.

Y sostuvo que este tipo de sujetos presentan “un nivel de frialdad que resulta incomprensible desde el punto de vista social”.

“Hay personas que tienen un egocentrismo e insensibilidad que excede cualquier cosa que uno pueda explicarle a su hijo respecto del peligro”, dice cuando se le pregunta como alertar.

Un delito penado desde 2013

Grooming. Es un delito descripto en el artículo 131 de Código Penal. Es la acción deliberada de un adulto de contactar a un menor mediante el uso de Internet para aprovecharse sexualmente.

Mecanismo. El agresor suele generar un perfil falso en una red social, sala de chat, foro u otro, en donde se hacen pasar por un chico o una chica y entablan una relación de amistad y confianza con el menor que quieren acosar.

Pena. Tras su incorporación en el Código Penal en el año 2013, el grooming estaEstá penado con hasta 4 años de prisión.

Prevención. Más que prohibir, Unicef pide brindarles herramientas a los chicos para que comprendan los riesgos que existen al compartir datos personales en la web.