Un vecino frustró el robo en una vivienda

Redacción de La Nueva.

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Parecía ser un robo más, pero no fue así. La valentía y osadía de un vecino del barrio Los Chañares pudo más que la astucia de dos delincuentes que minutos antes habían sustraído un televisor de una vivienda del barrio Los Chañares.

“Este hombre los persiguió con su auto hasta que los ladrones se bajaron de su coche en Don Bosco y Sesquicentenario, para luego escapar a pie”, dijo la víctima que se identificó como Florencia.

Todo ocurrió alrededor de las 14 del lunes, en el domicilio de calle Teresa Ascencio 520, donde hace quince años residen Rodrigo Romagnoli y su esposa, quien destacó que “gracias a Dios tengo un vecino que vale oro”.

“Los patachorros ingresaron por el portón que no había dejado cerrado. Barretearon una puerta de aluminio y rompieron el vidrio de esa puerta y el del paño fijo. Se llevaron el televisor de 42 pulgadas que estaba en el comedor”, explicó la mujer y señaló que “rompieron una puerta con vidrio doble”.

“Un televisor es plata, pero el daño provocado es más importante. La sensación que tengo es que estamos totalmente desprotegidos, a la deriva. Y me asustada porque cualquiera se puede llevar lo que quiere, a cualquier hora”, mencionó.

Al activarse la alarma puso en alertar al vecino –-no se suministró su identidad--, quien no dudó en perseguir a los ladrones.

“Este hombre escuchó la alarma, vino para acá, los vio salir de casa y los siguió. Eran dos que se trasladaban en un Ford Ka (dominio HYC 016), que ahora se encuentra (secuestrado) en la comisaría Segunda, donde apareció un hombre (Israel Leandro Dimarco) que dijo que lo había vendido”, acotó.

“Tuvimos un episodio parecido el año pasado; mejoramos la seguridad, aunque ahora entraron por otro lado. En aquella ocasión se llevaron un televisor, una notebook y un celular que estaba muy a mano”, recordó la mujer al ser consultada por un cronista de La Nueva.

Florencia sabe muy bien que no siempre existen respuestas como la ofrecida por su vecino, quien “escuchó la alarma y el estruendo que hicieron los vidrios rotos, se dio cuenta que pasaba algo y decidió salir con su camioneta.Vio que salía gente de casa y las empezó a seguir”.

Los deconocidos “llegaron hasta la esquina (de Viamonte), doblaron y siguieron dos cuadras hasta que volvieron a doblar para agarrar la ruta 35”, precisó.

La persecución se desarrolló alrededor de un kilómetro y medio, hasta que los malvivientes tuvieron un percance con el coche y continuaron la huida a pie.

“En la rotonda con Circunvalación (Don Bosco y Camino Sesquicentenario) los delincuentes hicieron un trombo, se bajaron y se fueron corriendo para lados diferentes. Ahí mi vecino se quedó al lado del auto, hasta que llegó mi marido y la policía. Yo vine a casa para mirar qué faltaba y por suerte era el televisor que estaba en el auto y que ya me devolvieron”, acotó la damnificada.

Y no escatimó elogios al considerar que “lo que más rescato de esto es que tenemos un vecino que se la jugó, porque hoy en día cualquiera escucha una alarma y no hace nada. Pero él llamó al 911, los siguió y nos avisó. La verdad, el papel más importante lo desarrolló él”.