Piden 18 años para el acusado por un crimen
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La pena de 18 años de prisión solicitó ayer el fiscal Christian Long, para un sujeto al que acusó de haber intervenido en el crimen de Cristian Diego Javier Echegaray (26), hecho cometido el primer día de febrero de 2013, en Villa Muniz.
El pedido fue realizado en el marco de los alegatos del juicio oral que está a cargo del Tribunal en lo Criminal Nº 2, integrado por los jueces María Eloísa Errea de Watkins, Claudia Fortunatti y Hugo Adrián De Rosa.
El titular de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Nº 5, imputó a Leandro Maximiliano Villagrán (23) como coautor del delito de homicidio simple.
Por el mismo hecho, y en juicio abreviado, el Tribunal en lo Criminal Nº 1 había condenado a Diego Avila, imponiéndole 10 años y 8 meses de cárcel.
Por su parte, el defensor oficial Jorge Sayago, sostuvo que Villagrán sólo intervino en una pelea con la víctima y que nada tuvo que ver con el desenlace fatal, por lo que reclamó su absolución.
El doctor Long consideró que en base a los testimonios escuchados durante la audiencia de la víspera, se acreditó que el acusado tomó parte del hecho registrado el 1 de febrero del año pasado, minutos antes de las 4, en la calle Araucanos al 200.
Indicó que Villagrán enrolló una tanza sobre la boca de la víctima para inmovilizarla y que esto fue aprovechado por Avila para aplicarle un puntazo en la zona torácica y producir su deceso.
Afirmó que la prueba fue “abundante y contundente” y que “no existió una pelea”, como argumentaron los imputados, sino que “hubo una emboscada y un asesinato frío y alevoso”.
Destacó el testimonio de Yamila Traversa, quien se encontraba con Echegaray al momento de los hechos y manifestó que poco antes los sospechosos se habían presentado en su casa, pretendiendo ingresar.
La joven sostuvo que no se lo permitieron y que más tarde, cuando habían salido a comprar vino, se concretó el feroz ataque.
Long destacó que la chica dijo haber visto que Villagrán lo “amarró con la tanza” y que Avila realizó el movimiento de apuñalamiento.
En el alegato también se aludió a lo expresado por dos policías que llegaron al lugar y entrevistaron a Traversa, quien les dio a conocer los datos de los atacantes.
Por último, el fiscal mencionó como agravantes la nocturnidad y el hecho de que la víctima fuera atacada por dos personas, encontrándose en estado de indefensión.
La defensa
A su turno, el defensor Jorge Sayago aseguró que Villagrán sólo intervino en una pelea y que no tuvo ningún tipo de participación e injerencia en el resultado final del trágico episodio.
Destacó que durante la instrucción su pupilo declaró que la víctima trató de robarle las zapatillas y fue entones que lo atacó y golpeó con un hierro.
Afirmó el defensor que Avila se expresó en el mismo sentido y que Echegaray esgrimió un arma blanca, por lo que intervino para defender a su amigo y extrajo un cuchillo que guardaba en la mochila.
Inclusive resaltó que Villagrán resultó lesionado por la agresión recibida.
“Mi asistido no tuvo voluntad de matar a nadie”, señaló Sayago, quien insistió que su pupilo “participó de una pelea sin armas propias o impropias”.
También dijo que en las conclusiones de la autopsia no había ninguna constancia acerca de marcas dejadas por la tanza en la boca de la víctima.
Para el abogado, el detenido no realizó un “aporte esencial o fundamental” en el delito investigado, por lo que pidió su absolución.
En forma subsidiaria, para el caso de ser señalado como responsable en el homicidio, reclamó que a Echegaray se le impute sólo una participación secundara, aplicándole el mínimo de la pena establecido por el Código Penal.