Un suceso bizarro y escapado de la peor historia surrealista
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Un episodio con tintes surrealistas se desarrolló en la comisaría Cuarta, donde una mujer que había denunciado a su concubino por violento, terminó desmayando a golpes a otra y arrancó un banco amurado al piso, mientras su pareja estaba confinada en un calabozo, se informó oficialmente.
Se trata de Adela Susana Molina (31), que comparte la vivienda de Castelar 3331 con María Rosa Uribe (53), dueña del inmueble, quien la acompañó hasta la dependencia de Garibaldi 262 para denunciar a Félix David Díaz Silva (31), al que imputó de haberla atacado para sustraerle un blister con pastillas y un celular.
Luego de entrevistarse con las mujeres en el lugar del hecho, personal del Comando de Prevención Comunitaria salió en busca de Díaz Silva, al que interceptó en Castelar y Pilcaniyén, de Villa Muñiz.
El hombre fue trasladado a la sede policial villamitrense, hacia donde también se dirigieron las mujeres, y a la que “Molina ingresa exaltada e insultando al personal policial de la guardia y a Díaz, por lo que Uribe intenta calmarla, pero es agredida con golpes de puño en el rostro y en otras partes del cuerpo, cayendo al piso desmayada”, dijo la policía.
“Además arrancó un banco que está atornillado al piso”, agregó luego el comisario Claudio Petrizán, titular de la seccional.
Posteriormente, cuando Molina fue trasladada a la sede de la Policía Científica, en Misioneros y San Lorenzo, atacó a patadas al médico Daniel Costantini.
A raíz de los hechos, Díaz Silva fue imputado de hurto y lesiones, mientras que a Molina --quien hace pocos días había acusado a Díaz de quemarle sus pertenencias en un predio abandonado del Hospital Interzonal General de Agudos Doctor José Penna, se la acusó de lesiones, resistencia a la autoridad y daño, quedando ambos a disposición de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Nº 15.