Bahía Blanca | Viernes, 29 de marzo

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Golpe comando en una joyería de Punta Alta

Cinco delincuentes armados participaron del atraco perpetrado ayer a la tarde en el comercio perteneciente a Alejandro Simkin, que funciona en la calle Bernardo de Irigoyen 21.
Golpe comando en una joyería de Punta Alta. Seguridad. La Nueva. Bahía Blanca

Cinco audaces delincuentes perpetraron ayer, apenas pasadas las 18, un violento golpe comando en la joyería La Esfera, que funciona en la calle Bernardo de Irigoyen 21, en pleno centro de Punta Alta y se alzaron con un botín no especificado, aunque se consideraba cuantioso.

El hecho se cometió cuando en el local había tres clientes y los desconocidos --que eran buscados hasta el cierre de esta edición, infructuosamente-- se alzaron con joyas de oro que sacaron de las vitrinas y de una antigua bóveda de seguridad.

Poco después del asalto y mientras el director de Seguridad comunal, Rubén Silva, permanecía en el comercio, el damnificado, Alejandro Simkin (52), brindó algunos detalles respecto del robo.

Dijo que todo comenzó cuando ingresó en la joyería un muchacho que se manifestó interesado en adquirir un juego de alianzas.

“Cuando se las estaba mostrando, me dijo que las señaba. Repentinamente, me pegó un empujón y movió todas las vitrinas. Empuñaba un arma y se mandó para adentro y nos pidió, con mucha vehemencia, que todos nos tiráramos al piso y que no levantáramos la cabeza porque nos iba a disparar”, expresó a este diario Simkin, todavía conmocionado por el dramático episodio vivido apenas algunos minutos antes.

Agregó que “nos ataron (las manos) con alambres y luego nos llevaron al fondo del comercio. Vi a una segunda persona, que también portaba un arma, pero me dijeron (los clientes) que había una tercera (que habría sido la que se llevó las joyas)”.

Simkin sostuvo que al entrar los ladrones se encontraban en el local dos empleadas y su hijo Nicolás, a quien uno de los malhechores le pegó un culatazo en la cabeza, mientras lo interrogaban acerca de “dónde teníamos las cámaras de seguridad”.

“Nunca hubiera esperado un hecho de esta naturaleza y, sobre todo, a esa hora --continuó el damnificado--. El único consuelo fue que no hubo gente lastimada. Todo ocurrió muy rápido. Algunas personas vieron el auto y anotaron la patente”, señaló Simkin.

El coche en que llegaron y se fueron los malvivientes era presumiblemente un Chevrolet Classic, chapa colocada JNB 640, de color blanco, que se encontraba estacionado en doble fila y dentro del cual aguardaban otros dos sujetos.

Según dijo el comerciante, en el sector donde está la joyería hay un movimiento constante de personas y vehículos.

“Es muy probable que hayan realizado un estudio previo”, consideró, y recordó que anteriormente sufrió otro robo, pero cometido por lo que llamó “rateritos”.

Ni bien se alertó a la policía puntaltense sobre el atraco, se montó un amplio dispositivo que incluyó el cierre de rutas en la vecina ciudad y en Bahía Blanca, pero los resultados fueron negativos.