La tecnología permite mayor prevención en el cáncer de colon
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David Roldán
droldan@lanueva.com
El cáncer colorrectal afecta al colon, también conocido como intestino grueso, o al recto.
La edad es el principal factor de riesgo para el cáncer de colon y a la mayoría de los pacientes se les diagnostica después de cumplidos los 50 años.
A eso le siguen los antecedentes familiares de pólipos en el colon o de cáncer de colon, especialmente en un pariente de primer grado como el padre, la madre o un hermano.
Un informe elaborado por la Mayo Clinic sostiene que en casi todos los casos los pólipos, también conocidos como adenomas colorrectales, son precursores del cáncer colorrectal.
“Si bien no todas las personas tienen pólipos, su presencia aumenta el riesgo de cáncer de colon”, comenta la doctora Victoria Gómez, gastroenteróloga de la Mayo Clinic.
A su juicio, los estudios han demostrado que, por ejemplo, la diabetes, la obesidad, el tabaquismo y el abuso del alcohol también pueden aumentar el riesgo de cáncer de colon.
En las primeras etapas, las personas con cáncer colorrectal posiblemente no presenten ninguna señal ni síntoma.
Las primeras señales y síntomas, precisamente, incluyen sangre en las heces, pérdida inexplicable de peso y dolor abdominal, entre otras.
En los Estados Unidos, todos los años se diagnostica cáncer colorrectal en aproximadamente 140.000 personas y es la segunda causa más importante de muerte por cáncer entre los hombres y la tercera causa principal entre las mujeres.
Según la Sociedad Americana del Cáncer, cerca de 50 mil personas mueren anualmente debido al cáncer de colon.
Los afroamericanos también corren más riesgo de desarrollar cáncer colorrectal a una edad menor y ciertos factores de su estilo de vida pueden aumentar el riesgo personal de padecer la enfermedad.
En nuestro país se detectan alrededor de 13 mil casos por año.
La pronta detección, a través de una exploración, es fundamental para extraer las lesiones precancerosas y aumentar la probabilidad de supervivencia, señala el gastroenterólogo de Mayo Clinic doctor Michael Wallace.
“Gracias a las recomendaciones mundiales respecto de las exploraciones y a la disponibilidad de alternativas para realizarlas, el cáncer colorrectal suele detectarse a tiempo”, señala el profesional.
La colonoscopía es el procedimiento de exploración más común que existe y lo recomendable para los adultos es según lo que aconseje el especialista.
A pesar de que durante el procedimiento se obtengan biopsias, el doctor Wallace puntualiza que los avances en la tecnología ahora permiten a los médicos identificar y extraer con más facilidad las lesiones precancerosas, lo que evita cirugías innecesarias en los pacientes.
Además, de la colonoscopía, los pacientes pueden aprovechar la colonoscopía virtual con una exploración por tomografía computarizada o un examen de ADN en heces llamado Cologuard, que fue inventado por el gastroenterólogo de Mayo Clinic doctor David Ahiquist, junto a otros.
Independiente del análisis seleccionado, al final lo más importante es que usted converse con el médico para que se le haga la exploración”, asegura la doctora Gómez.
Según la Encuesta Nacional sobre Factores de Riesgo para Enfermedades No Transmisibles llevada a cabo en 2013 por el ministerio de Salud de la Nación, sólo 3 de cada 10 personas de entre 50 y 75 años se había realizado alguna prueba de rastreo de cáncer de colon.
Si hablamos de prevención no olvidar que una detección temprana puede tener una salida más favorable.
La importancia de tener una vida más saludable
Estilos. Se recomienda hacerse chequeos médicos con cierta frecuencia, mantener una alimentación variada, rica en fibras (especialmente frutas y vegetales) y pobre en carnes rojas y grasas de origen animal, así como mantener un peso saludable.
Los antecedentes. Se estima que 3 de cada 4 casos de cáncer colorrectal se presentan en individuos sin antecedentes personales ni familiares. Puede haber factores dietéticos y ambientales.
Como combatirlo. Hoy el cáncer de colon se combate con cirugía para remover el tumor y los ganglios linfáticos y/o quimioterapia, según cada caso.
No esperar. Es muy importante no esperar a que aparezcan síntomas de ningún tipo, porque podría ser una señal de que la enfermedad ha avanzado.
Prevención y más prevención
Así como rápida y naturalmente adoptamos medidas de prevención ante determinadas cuestiones, de la misma manera deberíamos adquirir una conducta similar con respecto a nuestra salud.
Nadie dudaría en estacionar el automóvil debajo de un techo ante la inminencia de granizo, ni en utilizar el paraguas bajo una lluvia torrencial.
Tampoco en detenerse, si el semáforo está con luz roja, ni en ponerse repelente para ahuyentar a los molestos mosquitos.
Y así podríamos completar la página con ejemplos de conductas preventivas, para evitar males mayores.
Por múltiples razones que van desde “a mí no me va a pasar” hasta el temor a los exámenes médicos, pasando muchas veces por el pudor que genera el examen anal, no utilizamos la misma lógica cuando de cuidar nuestra salud se trata.
Está dicho y lo repetimos que con una colonoscopía, en pocos minutos se puede detectar la presencia de pólipos en el intestino grueso y en el mismo momento extraerlos, evitando la transformación en cáncer.
El día que incorporemos esta premisa estaremos terminando con la principal causa de muerte por cáncer en todo el mundo, tanto en hombres como en mujeres.
Dr. Oscar Casalini / Consultor en Gastroenterología - Colegio de Médicos Distrito X.