Beatriz Goyoaga: "No nos queda mucho en esta vida. Es tiempo de cambiar"

Redacción de La Nueva.

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Cecilia Corradetti

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Beatriz Goyoaga es la referente máxima del Arte de Vivir en Argentina. Sobre cómo ha llegado a serlo y los resultados de la amplia difusión de esta práctica que ha venido llevando a cabo en todo el país, se refirió en una charla con “La Nueva.” durante su visita a la ciudad.

“¿Cómo empecé? Simplemente fui una de las primeras participantes en la primera conferencia de Sri Sri Ravi Shankar en el teatro San Martín de Buenos Aires”, relata.

Había ido acompañando a su esposo, que se dedicaba a estudios orientales en la Universidad del Salvador.

“Nada de esto me interesaba como periodista de Política y Economía. Me sentía lejos de ese mundo”, rememora, para recordar que hasta entonces había trabajado cubriendo guerras y entrevistado a grandes personalidades, como George Bush, Madonna, la princesa de Gales, etc.

“¿Qué tenía que ver yo con ese mundo?”, se cuestionó.

--¿Cómo se difunde El Arte de Vivir?

--A través de cursos, programas masivos y campañas. Algo similar a lo que hace GreenPeace para el planeta. Eso mismo hace El Arte de Vivir para las mentes. No podemos tener sociedades pacíficas con individuos alterados.

--¿Nos encontramos con una sociedad cada vez más necesitada de hacer un alto y poder conocernos por dentro?

--Así es. Es la era del “fast fast”, es decir, todo rápido. Relaciones, “fast”, trabajo “fast”. Esto trae desasosiego, agotamiento y, en muchos casos, irritación y hasta violencia. Es necesario frenar y bajar un cambio: esto es lo que propone la fundación.

--¿Qué manifiesta la gente que se acerca para realizar estos talleres? ¿Cuál es su necesidad?

--Necesidad de poder dormir, de mejorar las relaciones, de dejar las adicciones, poder disfrutar la vida y, en muchos casos, poder aceptarse, ya que se ven transformados negativamente.

--¿Por dónde empezar para lograr una mente serena y, por ende, más creativa y productiva?

--El primer paso es darse cuenta: ver que el estrés no está ni en el trabajo, ni en la familia, ni en el dinero, por mencionar algo. El estrés está en la mente, que una vez alterada produce pensamientos negativos. Nos hemos convertido en máquinas de producir cortisol, la hormona del estrés. Nos acostamos preocupados, dando vuelta a los problemas y nos levantamos con la misma preocupación ya que el último pensamiento que nos llevamos al dormir es el primero con el que nos levantamos.

--¿Qué tips o recomendaciones les dejaría a quienes no pueden realizar los talleres?

--Primero y principal, ver que no queda mucho en esta vida, que la vida pasa rápido. Observar la alimentación como la primera fuente de energía. Con la energía baja los problemas se magnifican y con la energía alta se convierten en desafíos. También asegurarse un buen descanso y las horas necesarias de sueño. Finalmente, meditar y respirar que es lo que enseño desde hace 20 años. A mí la técnica de respiración me cambió la vida.

--¿Las técnicas de respiración promueven eliminar el estrés?

--La respiración está íntimamente unida a las emociones. Ansiedad, angustia, miedo... cada emoción que produce la mente conlleva un ritmo de respiración correspondiente. Trabajando con las respiración podemos entrar en el disco rígido donde está grabada la emoción.

--Sabemos que la Fundación dicta cursos en cárceles y también en colegios para prevenir el bullying ¿De qué manera se intercede en esto?

--Los niños tienen mucho estrés... hasta los menores de 8 años son violentos por la cantidad de comida basura que ingieren, la falta de contención familiar de padres y madres que trabajan muchas horas, además de la violencia en las pantallas, debido, en parte, a que la violencia se ha enganchado al éxito: el que es más violento y se anima más, es el más admirado. El Arte de Vivir les enseña a ventilar su rabia acumulada, a no hacerse mala sangre por las peleas de los papás, les refresca los valores humanos innatos en ellos y les libera las tensiones con la meditación y respiración.

--¿Cómo se actúa con los presos?

--Sri Sri Ravi Shankar, el físico fundador de El Arte de Vivir --cinco veces nominado al Premio Nobel de la Paz, ya posee el Premio de la Paz de Asia Mahatma Ghandi y 14 doctorados honoris causa-- dice: “Cuando se enferma el cuerpo vas al hospital, cuando se enferma la mente vas a la cárcel. Cuando la gente va al hospital les curamos... deberíamos hacer lo mismo con las mentes.” La rehabilitación es grande y muchos ex presidiarios son hoy instructores de técnicas de meditación y respiración que regresan a la cárcel, pero para dar una mano.