El trigo largó la carrera para combatir a la roya

Redacción de La Nueva.

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    Para la campaña triguera 2018/2019, que está por comenzar, la clave pasa por mejorar el perfil sanitario, habida cuenta de los perjuicios que atravesó el cultivo durante la anterior zafra.

   “Se trata de nuevas razas de roya, que han sido introducidas, se desarrollan en altas temperaturas y afectaron a la mayoría de los trigos comerciales”, dijo Matías Cardascia, gerente de Desarrollo de Productos de Nidera.

   “Por eso lo ideal es que el productor detecte qué nivel de problemas tuvo en la última campaña para así elegir la variedad adecuada”, agregó.

   Las royas amarilla, anaranjada y negra se han multiplicado en las áreas productivas, mayormente en el sudeste y en el sudoeste de la provincia de Buenos Aires.

Matías Cardascia.

   Cardascia afirmó que, como la mayoría de los productores está dispuesto a, cuanto menos, una aplicación de fungicida, ellos recomiendan productos como Baguette 680 y 750.

   “El 680 es un trigo que no tiene requerimiento de frío, por lo que da una mayor elasticidad para la fecha de siembra, ideal para productores que, por ahí, no tienen un perfil cargado y se les atrasa la implantación esperando la lluvia”, explicó.

   A la hora de las estrategias, dijo que la mayoría apunta a un grado 2, con algo fertilización nitrogenada tardía, para levantar algún punto más de proteína y evitar ser castigado.

Volar el lote

   Para el seguimiento del desarrollo de los cultivos, Nidera ha implementado un sistema para volar los lotes a través de drones.

   "Se mide el índice verde y, además, la altimetría. La idea es que el productor tome las mejores decisiones con las herramientas ideales que le provee la tecnología", sostuvo Lisandro Galíndez, gerente de Marketing de la firma.

   "Ya tenemos relevado el 50% de los lotes de nuestros clientes y esperamos completar el 100% para fin de este mismo año. Sin dudas, es una perspectiva diferente para mejorar los rendimientos", agregó.