Bahía Blanca | Viernes, 19 de abril

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La música, un motivo para viajes en tren por ciudades imperiales

Al placer de vislumbrar el pasado con pinturas y esculturas, se ofrecen viajes inspirados en la música. Uno une Praga, Viena y Budapest.
La música, un motivo para viajes en tren por ciudades imperiales. Turismo. La Nueva. Bahía Blanca

Corina Canale

corinacanale@yahoo.com.ar

“Este año vamos a intensificar la promoción en Argentina y Chile de un nuevo producto turístico: los viajes en tren que proponen recorrer Europa a través de la historia de la música”, le dijo a “La Nueva.” Graciela Basurto, ejecutiva de Rail Europe.

Uno de los tres circuitos musicales es el que une Praga, Viena y Budapest, las tres bellas ciudades imperiales en las que se inspiraron genios de la música.

Con siete viajes, diarios y directos entre estas capitales, los trenes de alta velocidad Railjet ofrecen en primera clase el acceso a una selección de música clásica a través de dispositivos móviles.

El placer comienza cuando el tren se pone en marcha.

La República Checa fue centro de la música clásica de los siglos XVIII y XIX, y la cuna de Antonin Dvorak, quien dirigió en Nueva York el Conservatorio de Música, y hasta que llegó su muerte el de Praga.

En esa ciudad se visitan los castillos a los que llevó su música, el Museo Dvorak, que cuenta su vida, y hacia el norte, en Nelahozeves, su casa natal. En septiembre se realiza el Festival Praga de Dvorak, cita que convoca a los melómanos del mundo.

Aquella “Praga dorada” cobijó al austriaco Wolfgang Amadeus Mozart, que en 1787 presentó allí su ópera “Don Giovanni”.

Esta ruta musical incluye “Las Cenas Concierto Mozart”, que llevan a los espectadores al siglo XVIII, con “La Flauta Mágica” y “Las Bodas de Fígaro” y los músicos ataviados con trajes de época.

Viena es sencillamente “la capital mundial de la música”, con una trilogía de compositores talentosos como el austríaco Franz Haydn, “el padre de la sinfonía”; Wolfgang Amadeus Mozart y el alemán Ludwing van Beethoven, a quienes se referencian como miembros de la “Primera Escuela de Viena”.

La casa real de los Habsburgo contribuyó al desarrollo musical porque era una dinastía arraigada a este arte, que convocaba a la corte a los mejores músicos.

Los grandes atractivos turísticos de Viena están ligados a la música, como la Ópera Nacional, la Casa de Mozart y la Casa de la Música, además del Palacio Imperial de Hofburg y el Palacio de Schönbrunn, ambas residencias de los Habsburgo y escenarios de memorables conciertos.

La ruta de los sonidos por esta ciudad sugiere los conciertos nocturnos de Mozart y Strauss en estos palacios y las cenas gourmet con música clásica en la sala de conciertos Musikverein.

Y, finalmente, Budapest, a orillas del Danubio, y el encuentro con Franz Liszt, el niño prodigio elogiado por Beethoven y el compositor y pianista austro-húngaro que fue el primero en dar recitales en solitario.

El mismo que cuando conoció a Nicola Paganini sólo quiso lograr en el piano lo que aquel logró interpretar en el violín.

En esta ciudad se visita el Museo Franz Liszt, en la que fuera su casa, y la Academia de Música que fundó.

Y, como homenaje por los doscientos años de su nacimiento, en 2011, su aeropuerto internacional lleva el nombre de su músico más prestigioso.

Otra de las rutas transita en tren por Londres, Birmingham y Liverpool, en Gran Bretaña, donde está lo mejor del rock, un ritmo vibrante y rebelde que surgió hace 50 años.

Con él llegaron los conciertos masivos y los festivales, las bandas y los solistas.

Una música que comenzó con The Beatles y The Rolling Stones, el más pesado con The Who y Led Zeppelin, la corriente del glam rock con David Bowie y Queen y los más contemporáneos como Oasis y Coldplay.

Y, por último, la ruta Barcelona-Madrid-Sevilla, en España, para sentir la pasión del canto, el baile y las guitarras del flamenco, que son, al mismo tiempo, expresiones alegres, lamentos y tragedias.

Solo hay que sumergirse en la magia del flamenco acompañado por interpretaciones de Paco de Lucía, Camarón de la Isla y Diego el Cigala.