"A estos malandras no les voy a dar el gusto de cerrar", dijo una comerciante asaltada el sábado
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Una comerciante puntaltense denunció que el sábado a la noche entró un ladrón armado, le apuntó a su hija de 18 a la cabeza y se llevó unos $ 8.000 de la recaudación.
“La arrinconó contra la heladera y me gritaba: 'Dame toda la plata o te quemo la nena'. ¡Gatilló, también! Fue una situación horrible”, contó Karina Gómez, dueña de una despensa de De la Madre al 1.000, en el barrio Atepam.
“Ayer no abrí por miedo, pero hoy sí. No voy a cerrar por estos malandras, no les voy a dar el gusto de dejar de trabajar.”
Agregó que el ladrón también se robó su celular y cuando se fue les tiró con un cajó de la verdura para que no lo siguieran.
“Algunos vecinos lo vieron irse corriendo. Mi hija dice que escuchó una moto. No sé si andaba solo o lo esperaban en algún lado”, dijo la mujer.
Calculó que tenía unos 30 años y dijo que ya lo había visto merodear días atrás. “No estaba drogado. Sabía bien lo que hacía”.
Auto secuestrado
Ese mismo sábado, los Inspectores de Tránsito del Municipio secuestraron un auto Ford Fiesta que escapó de un control en Colón al 300 y que creen que estaría vinculado con un asalto a un comercio.
Al auto lo persiguieron hasta el Barrio Albatros V, donde sus ocupantes lo dejaron abandonado. Ahí se corroboró que la policía lo buscaba.
Una mujer se presentó a reclamar el auto y quedó sospechada de participar del asalto.