Bahía Blanca | Lunes, 18 de marzo

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Conga y Bochín

Escribe Mario Minervino

Hace 75 años, en octubre de 1942, se presentó en el Teatro Municipal el mago Wu-Li-Chang, protagonizando una inédita campaña publicitaria.

Nativo de Gibraltar e incansable trotamundos, Wu-Li-Chang era el seudónimo de Leopoldo Sandalio Gasso, repetido visitante de la ciudad y la zona. Difícilmente alguna de sus funciones encontrara una platea desocupada. Es que, además de su arte, Wu-Li-Chang era un hábil empresario. La sección matinée de las 14.45, dedicada a los niños, incluía sorteos de juguetes y golosinas. Ronda, a las 18.15, para ancianos, niños pobres y estudiantes. Por la noche, el espectáculo “Donde manda Lucifer”, con desafíos, magia, prestidigitación y adivinación.

Aquella presentación de 1942 tuvo un elemento adicional, relacionada con dos marcas que auspiciaban al mago: hojas de afeitar Bochín y jabones Conga. Uno de sus actos tuvo en vilo a la población. Fue cuando la librería La Porteña informó que escondería “en algún lugar de la Plaza Rivadavia” varios paquetes con esos productos, los cuales serían buscados por Wu-Li-Chang. Para garantizar la limpieza del acto, el lugar exacto se guardó, en sobre cerrado y lacrado, en las vidrieras de la agencia de lotería Longo.

Wu caminó desde el Teatro con sus ojos vendados y con una fuerte custodia policial.

En la plaza deambuló un tanto desconcertado hasta que sus poderes visionarios le permitieron hallar lo escondido, para delirio de la multitud. Ahí mismo comentó que podrían ingresar a palco, platea y tertulia quien presentara “tres sobrecitos de hojas Bochín y un envoltorio de jabón Conga”.

Wu-Li-Chang actuó por última vez aquí en noviembre de 1944. La muerte lo sorprendió un mes después, en Coronel Pringles. Emparentado con la familia Régoli, sus restos fueron inhumados en nuestra ciudad. Vivió 47 años