Bahía Blanca | Jueves, 28 de marzo

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Provisión de gas a la EP 5 y la crítica del edil Pujol

Desde su bloque (GEN) relató lo que sucede en Bajo Hondo y cuál es la respuesta que recibió hasta ahora.
La EP Nº 5 "Bernardino Rivadavia", de Bajo Hondo.

Natalia Miguel

nmiguel@lanueva.com

El doctor Pablo Pujol (GEN) dijo que se requiere de manera urgente el aprovisionamiento de gas para la Escuela Primaria Nº 5 “Bernardino Rivadavia”, ubicada en Bajo Hondo, y además modificar el sistema administrativo mediante el cual se limita el repuesto, por lo cual se podrá garantizar la existencia permanente del suministro.

Al mismo tiempo, el edil, en la última sesión del Concejo Deliberante, solicitó la reparación del techo de ese establecimiento educativo para evitar las filtraciones y garantizar así la calidad educativa de los alumnos.

“La verdad que no es grato pero sí necesario continuar abordando la problemática que significa la falta de previsión y disposición de los recursos imprescindibles para atender la educación de nuestros niños. Este es el caso de una escuela de nuestro distrito, ubicada en Victorina de Llanos y Rivadavia, que por incomprensibles decisiones ejecutivas hace un par de días se encuentra sin gas”, indicó Pujol.

Agregó, en este caso, que el aprovisionamiento de gas se realiza mediante un botellón de 45 kilogramos. Así, continuó, se abastece a la cocina y los calefactores.

“Cuando se hizo la última reposición no se dejó uno de repuesto y, por lo tanto, cada vez que se queda sin gas, la escuela debe pedir uno nuevo. A la vista está que esta nueva modalidad no funciona y que lo único que ha logrado es que peligre no sólo el dictado de clases sino lo que es más vergonzante aún, la posibilidad de dar la merienda reforzada”, destacó.

Mencionó que las explicaciones dadas hasta el momento “son tan insólitas como la propia medida y tienen que ver con que ‘se gasta mucho’, sin poder visualizar en mi mente el esquema de razonamiento en el cual entraría un derroche de gas en una escuela que utiliza el servicio envasado en 2017”.

“A criterio de las autoridades el pedido ahora debe ser con anticipación a que el botellón se termine y estimo que la forma de saberlo debe ser sacudiéndolo para ver cuanto pesa y, a ojo, estimar la carga que queda y especular hasta que día aguanta”.

“La ironía es inevitable porque todo esto resulta aún más indignante cuando advertimos la cantidad de dinero que existe en el fondo educativo y la pijotería por uno o dos botellones más de gas al año”.

Añadió que “no tiene asidero ni justificativo alguno, negar y retacear un insumo vital como es el gas en una escuela. No se trata de una empresa y de su eficiencia, se trata de chicos y su posibilidad de alimentarse, de brindar un servicio y no de ahorrar a costa de ellos. Con millones de pesos de pesos del fondo educativo es inadmisible implementar un sistema que siquiera pueda suponer el riesgo que una escuela se quede sin gas una sola mañana. Estas cosas deben ser modificadas en forma urgente, sin miramientos ni discusiones de ningún tipo”, subrayó el concejal.