La jornada de Puertas Abiertas en la Base Naval recibió a una multitud
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Por Claudio Falzoni / cfalzoni@lanueva.com
Diez mil personas se dieron cita ayer, en la Jornada de Puertas Abiertas, que se desarrolló en la Base Naval Puerto Belgrano.
En soleada tarde de otoño, disfrutaron y se interiorizaron de la interesante propuesta que se desplegó en el asentamiento naval, desde las 14 y hasta luego de las 18 --el horario previsto para su conclusión--, a raíz de la gran expectativa que generó.
Lucieron engalanados, en el muelle oeste, los destructores “Heroína” y la “Argentina”, así como la corbeta “Robinson” y el transporte multipropósito “Hércules” que conforman la Flota de Mar.
Se pudo ingresar a cada una de las embarcaciones, donde los marinos respondieron a las preguntas e inquietudes que formularon los visitantes sobre los sistemas de armas y las característas generales, entre otros aspectos.
En la Plaza de Armas “Gómez Roca”, se desplegaron las muestras estáticas de la Infantería de Marina y de la Aviación Naval.
La Infantería presentó camiones, botes, las cocinas de campaña, los clásicos vehículos a oruga y una gran carpa,
La Aviación Naval exhibió sus helicópteros. Los pilotos dieron a conocer las distintos aspectos inherentes a la tarea que llevan a cabo en el quehacer diario.
También se pudieron observar los elementos que conforman los museos Naval, de la Infantería de Marina y de la Aviación Naval, ellos un misil Exocet y otros elementos de la Gesta de Malvinas, amén de mascarillas y maquetas.
Otro clásico atractivo fue la exhibición que llevó a cabo la Agrupación Perros de Guerra del Batallón de Seguridad. La destreza de los canes, ante los obstáculos, concentra siempre la atención de las familias, quienes en la víspera disfrutaron de un domingo diferente.
Los perros realizaron demostraciones en los diferentes escenarios: la búsqueda de personas, una manifestación y durante un robo.
A la espléndida jornada se asoció el espectáculo que se brindó con la tradicional regata del Día de la Armada.
También la nostalgia y los recuerdos fluyeron en profundidad cuando personas de la zona de influencia, que se desempeñaron en la Armada o que realizaron el servicio militar en la BNPB, se reencontraron con los distintos lugares y los paisajes que formaron parte de sus vidas.
Un micro, desde el puesto de acceso número 2 a la BNPB, transportó hasta dicha plaza a quienes no tenían una movilidad, previo paso por la zona reservada en el puesto Nº 113. Al término del encuentro los trasladó hacia dicho sector de ingreso al asentamiento castrense.
El colofón de la jornada se cristalizó con el arriado del pabellón nacional en la citada plaza. Lo realizaron, en forma conjunta, las unidades navales y la Banda de Música de la BNPB.