Carrió. Una más y van...

Eugenio Paillet

   Hay funcionarios de primera y segunda línea del gabinete nacional que suelen ser foco de consultas del periodismo por temas de los más diversos de la gestión, de la marcha del gobierno, de la política y la economía.

   Por lo general siempre habrá una respuesta a la mano, a veces un mínimo comentario o también un silencio olímpico, clara señal de que "de eso no se habla", aún pese al amparo del contacto siempre reservado de esos encuentros, sean en un despacho o en un pasillo.

   Son las reglas de juego no escritas entre funcionario y cronista, que sin embargo en los últimos tiempos no alcanzan para disimular un gesto incontrastable: el franco malestar que le produce a esos interlocutores cada una de las salidas a escena de Elisa Carrió. De esas en las que la líder de la Coalición Cívica, claro, utiliza no ya para atacar a la oposición o a sus blancos preferidos dentro del kirchnerismo, sino al propio oficialismo.

   Acaba de suceder con la última embestida de Lilita, durante un programa periodístico de cable de anoche, cuando poco menos que intimó a Mauricio Macri a que despida de su cargo a la número dos de la Agencia Federal de Investigaciones (AFI), Silvia Majdalani.

   "O la sacan a Majdalani o mantienen la vieja SIDE, que se decidan de una vez", avisó sin dobles lecturas la aliada crítica de Cambiemos.

   Aquel malhumor que suele generar en los funcionarios las apariciones de su socia provocó esta vez un encogimiento de hombros y un gesto con ambas manos hacia adelante, tipo "más de lo mismo, ya nos tiene acostumbrados".

   De todos modos, esta vez una fuente de consulta habitual desestimó que el presidente Macri le vaya a hacer caso Carrió, y remueva a Majdalani, exdiputada nacional del macrismo y exvicepresidenta de la Comisión Bicameral de Control de los Organismos de Inteligencia. Una designación, como la del titular de la AFI, Gustavo Arribas (también cuestionado en su momento por Lilita) de puño y letra del presidente.

   Carrió, se sabe, la tiene en la mira a Majdalani desde aquellos tiempos, y peor todavía la vincula a Francisco "Paco" Larcher, subsecretario de la ex SIDE durante el gobierno del matrimonio Kirchner, denuncia que hizo en 2012.

   El 4 de agosto pasado emitió un comunicado en el que le advirtió al gobierno de esos contactos y le exigió que instruyera a los senadores de Cambiemos para que no voten el pliego de Majdalani, aunque tampoco el de Arribas, que es amigo de la infancia del presidente. Ambos pliegos fueron aprobados dos semanas después.

   Sin ocultar su incomodidad, la fuente gubernamental desestimo de plano que el presidente vaya a disponer el relevo de la número dos de la AFI por el reclamo de anoche de Carrió en el programa de Joaquín Morales Solá.

   El funcionario aseguró que en el gabinete "entienden las puntualizaciones que suele hacer la señora Carrió" hacia cuestiones sobre la marcha de la gestión. Pero remarcó, como podía esperarse, que las decisiones las toma el presidente de la Nación.

   Recordó lo que ya se sabe: que Macri suele escuchar personalmente las preocupaciones de la líder de la Coalición Cívica, generalmente los viernes en una reunión a solas en Olivos.

   Pero en el caso puntual de Majdalani, no sin un dejo irónico, la fuente aseguró que el presidente "está muy conforme" con el desempeño de la "Señora Ocho", como se denomina oficialmente dentro de la AFI a Majdalani . Y se descuenta que también de Arribas, el "Señor Cinco".