Frases nefastas que quedaron en la historia
De mal en peor. Es muy pero muy triste recordar las frases utilizadas por ciertos expolíticos, hoy ya desaparecidos de la escena pública argentina. Por ejemplo: “alpargatas sí, libros,no”.
Tenemos las consecuencias de esa frase, en los nefastos resultados de la cultura del país.
Entonces, decimos que esos gobiernos, que nos repartieron sidras y pandulces, obtuvieron los resultados.
Pero los fondos, extractados del cono de la abundancia, quedaron vacíos.
Luego, conseguimos materializar un sueño bajo la consigna de “deme dos, me voy a Miami”, y otras, pero ahora deberemos, todos, pagar más de 100 mil millones de dólares.
Otros se gastaron los ingresos de cuando la soja en el mercado internacional subió a 600 dólares la tonelada, y hoy está en 350.
Pero se hicieron obras semifaraónicas, como ser hoteles en el sur, con la provincia re-fundida.
Pero nadie tiene responsabilidad de esos desfasajes, salvo el pueblo todo, que deberá pagar.
Y entonces, saldrá a relucir, el recordado “solo les puedo ofrecer sangre, sudor y lágrimas”
Tal vez deberíamos modernizar aquellos dichos, gritando “defoliantes, sí, inteligencia, no” que sería una manera de apoderarse del poder y hacer lo que la ambición personal está buscando.
Poder para tener dinero… ¡gratis!