Bahía Blanca | Jueves, 28 de marzo

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Un cambio positivo

Las autoridades municipales se manifestaron satisfechas con la conducta de los bahienses que, en ocasión de las Fiestas, parecen haber tomado conciencia del riesgo que significa conducir en buenas condiciones, sobre todo en lo que se refiere a la cantidad de alcohol que se consume.

Sobre 180 controles de alcoholemia realizados en puntos estratégicos de la ciudad, entre las 2:30 y las 7, se registró apenas un caso de test de alcoholemia con resultado positivo, es decir que quien conducía no cumplía con las condiciones adecuadas.

En la misma época de 2015, sobre una cantidad similar de controles (170), hubo diez resultados positivos (5,80 por ciento), lo cual muestra que se ha verificado una mejora interesante, más allá de que los porcentajes que se tenían en la ciudad son alentadores y por debajo de la media que registra la provincia.

un recurso, entre quienes participan de fiestas y reuniones familiares es alentar cada vez con más frecuencia la figura del conductor responsable, es decir, una persona que no toma alcohol y asume la responsabilidad de conducir, con lo cual se resuelve de muy buena manera la situación.

Otro es recurrir al servicio de taxis y remises -más allá de que en estas fechas se hace casi imposible conseguir un coche-, y también se impone la figura de padres que se encargan de ir a buscar a sus hijos, asumiendo que el consumo de alcohol, aun sin ser excesivo, pone en riesgo la capacidad de conducir sin problemas.

De la misma manera que en algún momento se dudó del éxito de la normativa de no fumar en lugares cerrados -una costumbre que terminó por imponerse de manera sorprendente, respetada a rajatabla por propios y ajenos, incluso en reuniones de carácter estrictamente privado-, parece ser que la costumbre de no conducir si se bebió en exceso también va encontrando una respuesta favorable.

se saben, no es necesario detallarlo, los riesgos que implica conducir alcoholizado, tanto para la propia vida como para la de terceros.

Del mismo modo que circular a velocidades excesivas, atender el celular mientras se maneja o no respetar los semáforos.

En la medida en que estas conductas se vayan corrigiendo, serán muchas vidas las que estarán a salvo. Es esta una razón que justifica ampliamente el esfuerzo conjunto de todos.