Tren a Tres Arroyos
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Hace 61 años, en septiembre de 1955, por decisión del flamante comisionado municipal, capitán de corbeta Guillermo Castellanos Solá, se rehabilitó el servicio de trenes entre nuestra ciudad y Tres Arroyos.
Habilitado el servicio en diciembre de 1891 por el Ferrocarril del Sud, el mismo había dejado de correr años antes, por lo cual Castellanos Solá inició gestiones ante el Ferrocarril Nacional General Roca, logrando instrumentar un servicio diario.
De acuerdo a lo narrado por Arturo Coleman, máxima autoridad del ferrocarril hasta la estatización del servicio, el citado ramal comenzó a operar con dos trenes semanales, aunque la demanda fue tan importante que pronto se modificó a un servicio diario.
También mencionó que en determinado momento se decidió establecer una parada de 25 minutos en la estación Las Mostazas (luego Coronel Dorrego), donde funcionaba una fonda que ofrecía una cena adecuada. Esa prestación se modificó con la puesta en operatividad de una cocina económica en el furgón de encomiendas, permitiendo a los viajeros cenar en el tren, con un menú consistente en huevos, salchichas, pan, café y vino francés.
La puesta en marcha del tren en 1955 estableció que lunes, miércoles y viernes saliera una formación desde Tres Arroyos a las 7.25, con llegada a Bahía Blanca a las 11.55, luego de 4:25 horas de marcha.
El regreso era a las 16:40, llegando a Tres Arroyos a las 20:45.
Los trenes tenían paradas en Micaela Cascallares, Irene, Aparicio, José A. Gisasola, Dorrego, Calvo, San Román, Bajo Hondo y Grünbein.
“Con este servicio, se dijo, se favorecerá a la población tresarroyense y de la zona, que tendrá un horario apropiado para realizar sus trámites en nuestra ciudad, con regreso a una hora oportuna”.