Bahía Blanca | Viernes, 29 de marzo

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Algunos “brotes verdes”

Por Pablo Wende

Desde octubre, la economía comenzó a mostrar algunos síntomas de mejoría. Posiblemente la caída del “blue” y la estabilidad que posteriormente mostró el tipo de cambio haya colaborado para que esto suceda. Pero en concreto, se observa una leve mejora en los niveles de consumo y algunos sectores muestran señales de repunte, como sucede con la construcción. En noviembre se mantienen estos síntomas, con lo cual ya se puede hablar de un último trimestre del año que claramente es mejor que el trimestre anterior, suavizando así la caída del PBI calculada para el 2014.

El economista Nicolás Dujovne revisó, por ejemplo, su pronóstico de PBI para el año, pasando de un rojo de 2,9% a otro de 2,3%, básicamente por la mejora que se está observando en este cierre del año. Aún a pesar de esta aparición de “brotes verdes” en la economía, como se los suele denominar en los Estados Unidos a los repuntes de la actividad luego de un período recesivo, todavía es demasiado temprano para considerar que ya pasó lo peor.

En todo caso, algunos comienzan a especular con un 2015 que será malo, pero reducen las estimaciones de caída. Por eso, algunos pronósticos que ya adelantaban una caída de 4 ó 5% del PBI, ahora indican que aún sin acuerdo con los holdouts, la merma no superaría el 1,5%. Y en caso de un arreglo la recuperación podría adelantarse, hasta llegar a 1,5%. Serían, de todas formas, números muy mediocres para coronar un segundo mandato de Cristina Kirchner.

Existen una serie de motivos que explican el repunte de este fin de año:

-La suba del precio de los bonos refleja que existe menos nerviosismo entre los operadores y en especial en el exterior. Los precios volvieron a los niveles “predefault”, lo cual muestra que existe un flujo de fondos que está posicionándose en activos locales.

-El plan “Ahora 12” impulsado por el gobierno ayudó a mejorar el consumo.

-Aún con férreos controles, la estabilidad del dólar también resulta favorable para el mercado interno.

-La expectativa de un cambio de gobierno empieza a tener un efecto en las decisiones económicas.

-Producto de la recesión y de la estabilidad cambiaria, la inflación en noviembre sería la más baja del año. Aunque no se trata de una tendencia definida, al menos se detuvo la espiralización que muchos temían hace apenas un par de meses, cuando el “blue” pegó un salto brusco hasta rozar los $ 16. Precios más tranquilos también juegan a favor del consumo y de la aparición de cuotas sin interés.