Bahía Blanca | Jueves, 25 de abril

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El futuro llegó: pros, contras y desafíos para docentes y estudiantes de la UNS

Representantes de 8 departamentos académicos analizaron la implementación de la educación a distancia.

Por Belén Uriarte / buriarte@lanueva.com

 

   Por el aislamiento social, preventivo y obligatorio, la Universidad Nacional del Sur (UNS) empezó a implementar la educación a distancia o remota en sus distintas carreras. Si bien era algo de lo que ya se hablaba —de hecho se utilizaba en cursos o prácticas de cátedras específicas—, la pandemia aceleró los plazos y docentes, personal no docente y alumnos debieron adecuarse rápidamente a esta modalidad.

   Ahora bien, ¿estaban dadas las condiciones? ¿es beneficioso este tipo de enseñanza? ¿qué resultados está dando?

   En esta primera entrega, representantes de 8 departamentos académicos de la UNS —en total son 16— hacen una evaluación de estos meses de dictado de clases y evaluaciones con el uso de herramientas tecnológicas. Coinciden en que la institución no será la misma post-pandemia; hay cambios que llegaron para quedarse.

 

¿Qué pros y contras hay en la educación remota o a distancia?

 

-Alfredo Juan (Departamento de Física):

   Si bien existían algunos recursos digitales que se utilizaban en algunas cátedras, el uso masivo fue producto del aislamiento social. Esta modalidad tiene aspectos tanto a favor como en contra.

   A favor y creo lo más importante, hemos mantenido el contacto docente-alumno y estimulado el contacto alumno-alumno en trabajos en comisión. En muchos casos se ha notado una participación importante; en otros el contacto ha sido esporádico y lejano. Para poner un ejemplo, hay materias de Física con 140 inscriptos donde la asistencia a clase supera los 100-120 alumnos, algo mayor que durante la presencialidad. En algunos casos hemos logrado una dinámica interesante con trabajos asignados entregados a tiempo, trabajos grupales, evaluaciones a distancia tradicional de lápiz y papel y envío de parcial mediante mensaje de texto, evaluaciones orales por videoconferencia, evaluaciones mediante sistemas de enseñanza remota como Moodle [...] La situación de todos modos es forzada en cierto modo, porque el contexto de encierro hace que nuestra actividad no compita contra salidas u otras actividades y los horarios se respeten mucho más. En algunas situaciones, el uso del vínculo tecnológico intermedio hace que los alumnos consulten más porque se pierden ciertas inhibiciones... 

   Como “contras”, evidentemente hemos perdido el contacto personal, las actividades prácticas de laboratorio se han pospuesto y el trabajo "codo a codo" imprescindible en tareas de tipo manual quedan pendientes. El acceso a los recursos informáticos y a la conectividad es muy variado: en algunos casos se hace imposible el dictado o la mera conexión de consulta. El acceso a Internet debería ser considerado tan esencial como disponer de agua corriente, claro para esto se requieren recursos económicos que no todas las familias disponen. Otro punto importante es que la virtualidad en las clases o en las relaciones humanas no reemplaza la manera tradicional: son otras formas que hemos ido aprendiendo y aun nos falta mucho por aprender.

-Andrea Castellano (Economía):

  Respecto de los pros creo que obliga más a planificar la actividad que uno va a realizar con los estudiantes y a tener mejor organizado no solo el contenido que se va a transmitir sino los dispositivos que va a usar para transmitirlo.

   Sin dudas las contras son muchas, creo que la primera está dada por los problemas de conectividad que pueden tener los chicos y los docentes, y obviamente la falta del contacto personal, del contacto visual, de poder captar en el aula las sensaciones respecto de si te van siguiendo o no, si les interesa el tema o no, si uno debe volver para atrás por algo que no quedó claro. A mí me gusta mucho la conexión con los estudiantes y ahora no la tengo porque ellos están con los micrófonos silenciados y si bien tenemos algunos intercambios no se puede comparar con el ambiente que genera el aula cuando hay presencia física del docente y de los estudiantes.

-Gastón Milanesi (Ciencias de la Administración):

   La ventaja es que la educación a distancia se adapta un poco más a la idiosincrasia del nuevo alumno y le otorga mucha más riqueza a los contenidos, como así también disponibilidad: uno puede grabar determinado tutorial, por ejemplo en YouTube, y eso queda disponible y cobra cuerpo material en lo que es un video: antes era una clase en abstracto que se la llevaba el viento amén del material que pueda llegar a darse.

   La gran desventaja creo que es una cuestión contemporánea, sobre todo en nosotros, los que tenemos que dar clases, que no estamos tan preparados para asumir este desafío; y después una cuestión de infraestructura tecnológica, más en Argentina en donde la cuestión de la conectividad si bien llega, no llega a todo el mundo, y eso hace que la educación a distancia sea asimétrica.

-Juan Carlos Schefer (Ingeniería):

   En este contexto de pandemia mundial que nos ha llevado a una situación disruptiva de nuestra vida y para lo cual no estábamos preparados, no resulta fácil enumerar acertadamente todos los pros y contras que tienen la educación a distancia, porque hemos debido actuar, resolver e improvisar sobre un problema que debía centrarse, principalmente, en tratar que el proceso educativo-formativo se resintiese lo menos posible [...] Si tuviese que mencionar los pros señalaría que, en el caso de los docentes, ha posibilitado que encuentren nuevas formas de comunicación, transmisión de conceptos y evaluación. En el caso de los alumnos, pueden ahora disponer en forma asincrónica de estos contenidos, estimulando el autoaprendizaje y la iniciativa. Así mismo se fomenta el funcionamiento de foros de discusión que los entrena en las competencias blandas: las de exponer y discutir alternativas.

   Centrándonos en la parte negativa de esta virtualidad, en lo que se refiere a las carreras de Ingeniería el proceso formativo no se completa en ausencia de prácticas. El futuro profesional no puede manejar una estación total si no lo ha hecho efectivamente alguna vez. En la educación a distancia se puede explicar pero no experimentar y esto es fundamental porque fija los conocimientos y los conecta con  conocimientos previos.

   Además, la igualdad de oportunidades que brinda la universidad pública y gratuita se resiente porque los actores, principalmente los estudiantes, están condicionados a su disponibilidad de medios técnicos y conectividad, que se profundiza para quienes viven en lugares aislados o alejados de las ciudades. 

-Marcelo Falappa (Computación):

   Primero hay que distinguir cómo se suben los contenidos: a) se realizan de manera sincrónica (clases en vivo) y no se graban esos encuentros; b) se realizan de manera sincrónica (clases en vivo) y sí se graban esos encuentros; y c) se realizan de manera asincrónica, con material multimedial generado por los docentes. La opción "a" sería casi como la modalidad presencial con la única salvedad de que se podría realizar sin estar físicamente en la universidad. Las opciones b) y c) permitirían una mejor oportunidad para los alumnos ya que, aquellos temas que son más difíciles de asimilar, podrían verse una y otra vez hasta tratar de entenderlos.

   Las clases en vivo (ya sea en modalidad virtual o no) tienen lo bueno de la discusión, el debate, la pregunta, la respuesta, la repregunta... A veces uno planifica una clase para darla en determinado tiempo y la dinámica de la misma puede modificarse a partir de la participación de los alumnos.

   Una de las mayores desventajas que encuentro es lo referente a la evaluación. Si bien se cuenta con medios para evaluar a los alumnos de manera remota (por ejemplo, mediante la plataforma Moodle) siempre cuesta certificar que quien está siendo evaluado sea realmente quien dice ser que es. La otra gran desventaja que encuentro es la desigualdad: las personas de menos recursos difícilmente puedan acceder a esta modalidad de estudio si no se garantiza que cuenta con un espacio, equipamiento y conectividad para poder estudiar. En ese aspecto, la UNS brinda mucha ayuda desde la Secretaría General de Bienestar Universitario.

-Pablo Badr (Ciencias de la Salud):

   En primer lugar es necesario establecer qué cambia en la educación remota: lo que cambia es el medio por el cual un sujeto interactúa con otros y con un entorno, interacción en la que se espera que se den los procesos cognitivos y metacognitivos que se requieren para el aprendizaje. En este sentido, no existe una comparación única entre la interacción presencial y remota. En el primer caso podemos referirnos a una clase magistral, centrada en el docente, en la que se enfatiza en replicar un contenido de un libro mediante la voz del docente y su habilidad para generar un soporte audiovisual, o una actividad en la que la interacción se centra en el estudiante y sus necesidades para cumplir un objetivo, y donde el docente facilita y orienta el aprendizaje.

  En la virtualidad podemos encontrar ejemplos también en los dos extremos de este espectro. En este sentido, y eliminando el concepto de que una modalidad es mejor que la otra, hoy hemos encontrado como mayor desventaja de la educación mediante TICS la falta de accesibilidad universal del estudiantado a las tecnologìas necesarias para llevar adelante este proceso.

-Pamela Tolosa (Derecho):

   En este contexto, la enseñanza bajo la modalidad no presencial nos ha permitido facilitar el acceso a la educación de nuestros estudiantes de grado y posgrado; y claramente eso es una gran ventaja.

   Las contras o desventajas se relacionan con el hecho de que esta modalidad surgió como una necesidad de un modo repentino y, por lo tanto, no tuvimos posibilidad de organizar todos los recursos necesarios de una manera óptima, como nos hubiera gustado. Los y las docentes, no docentes y estudiantes se han encontrado con numerosas limitaciones para enfrentar los cambios abruptos que se impusieron. Y, en relación a dichas limitaciones, existen algunas asignaturas - especialmente en ciertas disciplinas específicas- respecto de las cuales no fue posible organizar una modalidad no presencial precisamente por la falta de recursos, tiempo y alternativas pedagógicas adecuadas para poder implementar un cursado no presencial. 

-Sheldy Ombrosi (Matemática):

   La ventaja principal es la posibilidad de continuar con la enseñanza. Otra ventaja es la eliminación de las fronteras geográficas: se puede acceder a una clase desde nuestra ciudad o desde Pekín. La principal desventaja es que en muchos casos no hubo posibilidad de preparación previa. Otra desventaja es que si bien desaparecen fronteras geográficas, aparecen otras de recursos, conectividad y accesibilidad.   

 

¿La UNS estaba preparada para su implementación?

 

   -Alfredo Juan (Departamento de Física):

   La UNS disponía de varios recursos digitales ya en uso en la denominada "Educación a Distancia" con cursos que se dictaban por videoconferencia con asistencia del sistema Moodle, entre otros. Sobre todo en cursos de especialización y de dictado de materias en localidades de la zona donde ocasionalmente no se podía asistir presencialmente. De hecho, el rector Dr. Daniel Vega impulsó fuertemente la organización de una dependencia específica denominada SIED (Sistema Institucional de Educación a Distancia). Sin embargo esto no había llegado a ser desarrollado en la escala actual.  

   Durante los días iniciales de la cuarentena la respuesta de la institución fue muy rápida: se contrató el uso de sistemas de videoconferencia para cursos numerosos y con medios de seguridad para reuniones de consejo virtuales, se dispuso de una red de consulta en cada departamento, se relevaron capacidades existentes y se suplieron muchos aspectos. La movilización de la institución para no detenerse fue muy encomiable, con una apoyatura de alto compromiso de todo el sector no docente administrativo e informático de la UNS. El sector telecomunicaciones debió atender urgencias de todo tipo con un uso masivo de mails, de acceso a sitios, luchando contra la saturación de los sistemas, dando vigilancia permanente casi las 24 horas. Se hizo un importante trabajo desde la Secretaría de Bienestar Universitario relevando y analizando ayudas con entregas de tablets a centenares de alumnos, préstamos de notebooks de nuestras bibliotecas, armado de una red de contención con participación de los centros de estudiantes. Se logró mitigar la falta de conectividad a través de acuerdos con los proveedores de datos y hubo un acompañamiento muy importante del gobierno nacional en habilitar usos sin cargo de sitios de dominio de educación. 

   Los docentes debimos aprender rápidamente el uso de muchas herramientas (y lo digo en primera persona también) y eso llevó a invertir largas horas de trabajo que aún hoy se sostienen para lograr que el sistema funcione. 

-Andrea Castellano (Economía):

   La UNS no estaba preparada a pesar de que el año pasado se había trabajado mucho y se había logrado acreditar el Sistema Integrado de Educación a Distancia. En los últimos 10 años estuvo muy atrasada en lo que es educación a distancia y solo se limitó a trabajar con esta modalidad en una estructura muy pequeña y básicamente orientada a cursos de actualización profesional. Sin embargo, creo que hubo un gran esfuerzo por parte de la Secretaría General Académica en brindar las herramientas para que los docentes podamos adaptarnos rápidamente a la modalidad virtual. Se crearon alrededor de mil aulas virtuales y tuvimos asesoramiento permanente tanto técnico como pedagógico, aunque fue un aprendizaje forzado. No hubo una capacitación previa ni una programación de lo que se iba a hacer; pero tampoco alternativas.

   Es importante destacar que la UNS es de las pocas universidades del país que mantuvo el desarrollo académico de todas las actividades a pesar de la pandemia. Eso es muy valioso porque permitió que los estudiantes no perdieran el cuatrimestre.

-Gastón Milanesi (Ciencias de la Administración):

   La UNS, como todas las universidades que no estaban teniendo una oferta sostenida en educación a distancia, no estaba del todo preparada. Había unidades académicas que sí: por ejemplo, el departamento que me corresponde representar en este momento estaba pseudo preparado para lo que era la educación a distancia, nosotros habíamos hecho capacitaciones en el año 2017 en Quilmes, no solamente en lo que respecta a educación sino a la gestión curricular del departamento; habíamos empezado a llevar adelante una digitalización de los documentos, resoluciones y manejo remoto de la gestión administrativa, por ende no nos resultó tan incómodo.

-Juan Carlos Schefer (Ingeniería):  

   Relativamente, para una situación como la que estamos viviendo nadie estaba preparado pero existían herramientas como la plataforma Moodle que estaban subempleadas, más que nada como repositorio de documentación. Nuestro Departamento creó un aula virtual destinada a sus docentes, para capacitación, y se generaron espacios y cursos para el manejo de herramientas de comunicación virtual. Siguen existiendo algunas dificultades para implementar las evaluaciones, especialmente en los cursos que son muy numerosos.

   Por otro lado queda pendiente para la etapa presencial la realización de los trabajos prácticos en los laboratorios y de esta manera poder cerrar el cursado de algunas materias. El uso de plataformas gratuitas para clases virtuales ha sido implementado con gran dedicación y esfuerzo de los docentes y no docentes, y la Universidad ha recurrido a la adquisición de licencias de plataformas que posibilitan el uso sin limitación de tiempo. 

   Se ha realizado un gran esfuerzo (y se continúa) para generar materiales aptos para la nueva metodología y permitir, además de "compartir" los conocimientos, la contención de los estudiantes. Los jóvenes (estudiantes y docentes recién graduados) están más preparados porque tienen una familiaridad mayor con las tecnologías de comunicación. Aún así, también han experimentado otro tipo de inconvenientes: es más difícil el trabajo en equipo, la distribución de tareas y el compartir el aprendizaje, por la falta de contacto entre pares.

-Marcelo Falappa (Computación):

   La UNS siempre ha brindado cursos de capacitación pero la realidad es que esto obligó a precipitar los plazos y casi todos los cursos pasaron a esta nueva modalidad. Eso significa un cambio obligado de paradigma, con todas sus ventajas y desventajas. 

   Hoy hablamos de Zoom, Hangouts, Google Meets, Jitsi, Skype o incluso WhatsApp y no todos comprender totalmente cómo usar esas aplicaciones. Algunos docentes venían avanzando en subir algunos contenidos digitales pero esto obliga a hacerlo con todo o casi todo. Eso trae muchas complicaciones ya que cada docente debió improvisar en su casa un espacio y un momento para grabar sus clases o realizar las videoconferencias. Muchísimos docentes están haciendo un enorme esfuerzo al respecto porque, a su vez, tienen hijos en edad escolar y deben acompañarlos en sus clases.

-Pablo Badr (Ciencias de la Salud):

   El Departamento de Ciencias de la Salud, ya hace 11 años, resolvió formar a dos docentes de su cuerpo en una maestría en entornos virtuales de aprendizaje. Desde esa fecha se han ido implementando distintas estrategias de capacitación docente, lo cual se tradujo en que este departamento fuese a inicios de 2020 el Departamento Académico con mayor tasa de utilización de la plataforma educativa Moodle. Esto nos permitió adaptarnos rápidamente a los procesos de enseñanza-aprendizaje no presenciales. Nuestra mayor dificultad se relaciona con la necesidad de generar aprendizaje de competencias comunicacionales, habilidades de intervenciones, procedimientos y examen físico, en los cuales las experiencias presenciales no tienen reemplazo.

-Pamela Tolosa (Derecho):

   La UNS ha demostrado una capacidad de adaptación increíble para poder brindar el servicio docente de manera no presencial. Fuimos una de las primeras universidades que puso en marcha el dictado no presencial de sus materias y la toma de exámenes finales de esta forma, en todos los casos donde fuera posible hacerlo. Esto se debió fundamentalmente a la gran predisposición y buena voluntad tanto de los y las docentes, como del personal no docente.

   Por supuesto que nadie estaba preparado para un cambio imprevisto y repentino como el que ocurrió. Hicimos lo que pudimos con los recursos disponibles, creatividad, dedicación y con el convencimiento de que la universidad pública debía hacer el mayor esfuerzo posible para facilitar el acceso a la educación de nuestros estudiantes. Afortunadamente la UNS cuenta con un campus virtual de primer nivel a través de la plataforma Moodle, que ofrece recursos muy interesantes para la modalidad de enseñanza a distancia. En el caso del Departamento de Derecho, contábamos con la ventaja de la experiencia desarrollada con educación en contextos de encierro, principalmente en relación a la Unidad Penal 19 de Saavedra. 

-Sheldy Ombrosi (Matemática):

   La UNS, y todas las unidades académicas, que efectivizan el dictado de las diferentes asignaturas están haciendo un esfuerzo muy importante. Particularmente me gustaría resaltar el compromiso del personal docente y no docente en general de toda la Universidad y en especial el de nuestra unidad académica porque la realidad es que, al menos en Matemática, no había ningún curso ni de grado ni de posgrado que se dictará de manera virtual. Algunas unidades académicas sí tenían la experiencia previa de la educación a distancia y evidentemente para ellos la adaptación ha sido más sencilla. 

   Si bien la Universidad y los Departamentos están haciendo un gran esfuerzo para brindar recursos para la mejor ejecución posible, todavía queda trabajo por hacer para que los cursos tengan el ideal de las clases y evaluaciones como si fueran presenciales, al menos en Matemática.   

 

Antes de la pandemia, ¿se hablaba de este tipo de enseñanza para el corto plazo?

 

-Alfredo Juan (Departamento de Física):

   Definitivamente se ha acelerado el proceso de implementación de la educación a distancia por la importante experiencia acumulada en el uso masivo de los recursos. El Departamento de Derecho de la UNS es pionero en el tema, ya que hacía uso de estas herramientas virtuales para dar cursos de abogacía a internos y tomaba exámenes a distancia. También utilizaba habitualmente videoconferencias en las defensas de tesis o casos puntuales de reuniones con colegas de otros países por temas de investigación, pero nunca de forma masiva como requiere el dictado de clases. 

   A veces ese uso no es óptimo y hemos "aprendido a los golpes" por la situación inevitable de no haber alternativas. Se había establecido por parte del rectorado como una de las prioridades el desarrollo de la educación a distancia, con una dependencia específica y con estructura no docente para atender el tema. Pero es necesaria mayor capacitación, mejorar los recursos de conectividad y atender aspectos de la dinámica del uso de estos medios de teletrabajo y de educación virtual. En muchos casos los docentes nos relatan las incontables horas de preparación de un video, de clases demostrativas, de usar aplicaciones de diversos tipos; lo que mantiene a algunos “permanentemente enganchados”. En varios casos los alumnos tienen dificultades de conectividad, y estos son aspectos que deberían atenderse con una mirada de acceso universal a los recursos. 

   Creo que se han derrumbado una serie de mitos o preconceptos sobre la virtualidad que van a permitir integrarla a diario en nuestras actividades dando mayor oportunidad de optimizar recursos y tiempo. 

-Andrea Castellano (Economía):

   Es cierto que la pandemia adelantó algo que sin duda va a venir pero que de ninguna forma va a reemplazar la enseñanza presencial. Creo que la va a complementar, permitiendo un ahorro de recursos y tiempo porque uno está obligado a planificar lo que va a hacer, y eso es muy bueno en la enseñanza.

   Se hablaba de implementar la educación a distancia sobre todo en aquellas carreras más profesionalizadas, a partir de observar que hay otras universidades que están llegando a la ciudad y la región con una oferta completamente virtual. Sin dudas la virtualidad va a incluir a mucha gente que hoy tal vez no puede participar de las actividades tradicionales que tienen universidades como la nuestra donde hay una alta carga de actividad presencial. Tal vez estos sistemas combinados van a facilitar la situación especialmente de aquellos que trabajan y de los que están en la zona y no pueden acercarse a Bahía Blanca para cursar.

-Gastón Milanesi (Ciencias de la Administración):

   La pandemia adelantó los plazos. En la comunidad académica hay  personas que son reacias a la educación a distancia. Nosotros siempre la defendimos como un complemento de la educación presencial y de hecho yendo a la semipresencialidad, entendiendo las necesidades del perfil de nuestros alumnos.

   Esto aceleró los procesos pero no democráticamente: las personas que no están muy de acuerdo pueden haberse visto obligadas a implementarla. Hay que reconocer que en determinadas disciplinas es muy complicado, como en aquellas que requieren de infraestructura y laboratorio.

-Juan Carlos Schefer (Ingeniería):  

   De algún modo (y ello visto desde la óptica de alguien que lleva más de 50 años en la Universidad y transitando el último) diría que nos hizo "apretar el acelerador".

   Paralelamente al uso de la plataforma Moodle ya mencionada, se estaban desarrollando cursos de extensión para estudiantes avanzados y graduados recientes. También se estaba iniciando el proceso para "virtualizar" materiales en algunas asignaturas, grabando clases para subir a plataformas como YouTube. Básicamente, por iniciativa particular de algunos docentes que ya habían realizado experiencias en ese sentido (posgrados a distancia, por ejemplo), así como concursos docentes con presencia virtual de algunos de los miembros del jurado.

-Marcelo Falappa (Computación):

   La modalidad a distancia es algo que se buscaba implementar desde hace mucho tiempo. No es que la UNS cambiará totalmente a distancia pero si podrá adaptarse mejor a esta modalidad. Lo positivo de todo esto es la oportunidad de cambiar para mejorar.

-Pablo Badr (Ciencias de la Salud):

   La UNS trabaja desde hace más de dos años en el Sistema de Educación a Distancia, el cual se acredita ante CONEAU para la implementaciòn de carreras no presenciales. Nuestras docentes expertas en entornos virtuales de aprendizaje forman parte de dicha comisión.

-Pamela Tolosa (Derecho):

   No sólo se hablaba de la educación a distancia, sino que la UNS tiene oferta de cursos de posgrado y de formación profesional con esta modalidad, aunque muy acotada.

   Asimismo, la universidad se encontraba trabajando en un proyecto para potenciar la educación a distancia y generar una oferta significativa en ese sentido, en el grado y posgrado, y particularmente en el Departamento de Derecho contamos con un par de proyectos en esa línea. Creemos que toda esta experiencia nos permitirá avanzar más fácilmente en ese sentido.  

-Sheldy Ombrosi (Matemática):

   La discusión de la enseñanza virtual en algunas disciplinas está instaurada hace tiempo en nuestra Universidad y de hecho en algunas carreras se está llevando adelante. Claro que aceleró la implementación en otras disciplinas y/o asignaturas donde no estaba previamente planificada y esto tiene sus dificultades.

 

Si bien pasó poco tiempo, ¿qué balance se puede hacer sobre su implementación?

 

-Alfredo Juan (Departamento de Física):

   Tengo impresiones sobre el balance, en general, más personales que estadísticas. Se debe destacar el enorme esfuerzo de todos los actores para adaptarse; no es todo lo que hubiéramos deseado pero hemos avanzado mucho. Creo que se ha revalorizado también el rol de las investigaciones de nuestros científicos, dando la importancia que merecen y orientando sus trabajos con fines concretos.

   En el plano educativo hay muchos cursos que han funcionado muy bien y concretarán sus evaluaciones a fines de julio; en otros se deberán esperar acciones complementarias cuando las condiciones de la cuarentena lo permitan. Los alumnos han respondido muy bien, aunque no todo es homogéneo, depende mucho de la actitud del docente, la metodología y los recursos que logre usar. Es una dinámica que a algunos les sale natural pero con mucho de autodidacta, no estábamos masivamente entrenados en la virtualidad. La multiplicidad de disciplinas hace variada la respuesta: por ejemplo, en cursos de computación imagino se han adaptado muy bien, en cursos de matemática iniciales con alumnos que ingresaron este año quizás ha sido muy difícil. 

-Andrea Castellano (Economía):

   El balance para mí es positivo. Tomamos la primera evaluación parcial y estamos contentos con el nivel de responsabilidad con el que respondieron los estudiantes. Han estudiado mucho más que los libros. Creo que si uno lo pondera en el marco de la crisis que significa para la universidad y el país enfrentar la pandemia aún estos resultados positivos se resaltan más.

-Gastón Milanesi (Ciencias de la Administración):

   En el departamento de Ciencias de la Administración, en lo que respecta a las carreras de Contador, Licenciatura en Administración, los posgrados que damos y las tecnicaturas como la oferta de extensión, la verdad que el balance es más que satisfactorio. En realidad los chicos no perdieron el año; están cursando todas las materias, están siendo evaluados, estamos respetando fechas de finales.

-Juan Carlos Schefer (Ingeniería):

   Creo que hay un balance positivo por la rápida reacción de nuestra Universidad para asegurar la contención de nuestros estudiantes, desarrollar el ciclo lectivo cuatrimestral manteniendo la calidad académica y suministrando las herramientas tecnológicas apropiadas. Ello es posible por el gran esfuerzo que hicieron y hacen hoy docentes y no docentes, en un marco de ansiedad y angustia provocado por este aislamiento que nos afecta a todos.

-Marcelo Falappa (Computación):

   Creo que como experiencia nos enseñó que se puede. Tal vez en el futuro, con un formato híbrido, puedan implementarse muchos contenidos con modalidad a distancia. Desde luego, existen materias que no pueden hacerlo, sobre todo aquellas que requieren laboratorios específicos. En nuestra disciplina, la informática, creo que sería más natural que en otras. 

-Pablo Badr (Ciencias de la Salud):

   En el caso de las carreras de Ciencias de la Salud, la implementación del aislamiento preventivo social y obligatorio se dio cuando ya estaban cursando 5 años de la carrera de Medicina (desde el 18 de febrero). A partir de allí se implementaron una serie de actividades de reemplazo de las presenciales, y tanto en esta carrera como en Enfermería, la mayor dificultad se relaciona en que el cuerpo docente está afectado, mayoritariamente, a la actividad asistencial en el sistema de salud.

   Por lo tanto en el balance no pueden diferenciarse estos dos aspectos, siendo el segundo el que nos requirió mayores esfuerzos para adaptar los programas que se encontraban planificados. En términos objetivos, hemos reconocido que las competencias comunicacionales y de intervención y examen fìsico no pueden desarrollarse, siendo reprogramadas; y, con mínimas excepciones, podemos decir que la totalidad de las cursadas y exámenes que debían realizarse pudieron hacerse en esta nueva modalidad.

-Pamela Tolosa (Derecho):

   Considero que sería apresurado hacer un balance. No obstante, creo que ha sido muy positivo que la Universidad haya buscado alternativas para que los y las estudiantes no pierdan el cuatrimestre. En ese sentido, creo que la universidad pública ha estado a la altura de las circunstancias, aun con todas las limitaciones propias de un cambio tan repentino. 

-Sheldy Ombrosi (Matemática):

   El balance a mi entender es positivo, por supuesto que no son ideales las condiciones actuales pero la otra opción era tener la Universidad cerrada. Esperemos que sigamos mejorando el sistema y que también de a poco podamos volver a lo presencial en donde la enseñanza lo requiere de manera ineludible. 

 

¿Cómo imaginás a la UNS y otras instituciones educativas después de la pandemia?

 

-Alfredo Juan (Departamento de Física):

   La UNS no volverá a ser la misma. Es un nuevo mundo que hemos descubierto y probado masivamente en una especie de experimento forzado que no se hubiera concretado de esta forma de no darse la cuarentena obligatoria. Es una oportunidad de sacar un aprendizaje de la adversidad y de cómo podemos implementarlo mejor y cómo ser mejores docentes con recursos novedosos en un mundo que avanza inexorablemente a aspectos de teletrabajo y en el que también debemos preparar a nuestros alumnos en su futuro laboral. Además de la conectividad digital debemos avanzar en ser multilingües - o al menos bilingües- para lograr comunicarnos mejor con otras culturas y así disponer de más y mejores oportunidades. Hoy internet se reafirma como un elemento democratizador al que todos debemos tener las posibilidades de acceder, eso es un derecho que como sociedad debemos reclamar.

   Respecto de los docentes, espero se puedan implementar capacitaciones para mejorar el uso de estos medios y en aspectos de teletrabajo administrativo poder contar con más recursos físicos: velocidad, VPN, mejores servidores, conectividad, compatibilidad de sistemas, entre otros. En ciertos aspectos la UNS va camino a una "despapelización" de muchas de sus estructuras de gobierno y administración, que hará más sencillo nuestro trabajo y con medidas complementarias nos permitirá ser más eficientes. 

-Andrea Castellano (Economía):

   No tengo dudas de que muchos de los avances que se lograron en educación a distancia se van a mantener. Me imagino una universidad con una oferta más flexible en cuanto a proponer alternativas exclusivamente a distancia de cursos de actualización, de carreras de posgrado y de grado, tal vez con la combinación de algunas actividades presenciales puntuales y el resto de la actividad cargada sobre las redes. Esto no va a ser tan sencillo en aquellas disciplinas que requieren mucho trabajo de campo de laboratorio.

   He estado viendo contenidos de organismos que han implementado hace mucho tiempo la educación a distancia y la verdad que las posibilidades de mejorar lo que tenemos son muchas; es un camino que empezamos a andar de manera imprevista pero con buenos resultados y que tenemos que afianzar.

-Gastón Milanesi (Ciencias de la Administración):

   Voy a parafrasear al filósofo Darío Sztajnszrajber: "No creo que haya un nuevo mundo después de la pandemia, van a haber nuevas prácticas y nos vamos a animar a algunas cuestiones que no nos animábamos"; entre ellas, la educación a distancia como una herramienta más dentro del concepto de presencialidad en el marco de las universidades públicas.

   Creo que a los que podamos nos va a abrir las puertas para enriquecer aún más los contenidos y armar cuestiones y ofertas semipresenciales que sean más flexibles y se adecuen más a los tiempos sobre todo de aquellas personas que necesitan trabajar o desarrollar otras actividades.

-Juan Carlos Schefer (Ingeniería):

   Imagino que al final de esta crisis provocada por la pandemia saldrán fortalecidas, porque en muy poco tiempo han desarrollado metodologías de enseñanza innovadoras y más centradas en el aprendizaje de los alumnos.

   Por otro lado, la comunidad educativa ha experimentado el uso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación que la prepara con mejores herramientas para la formación de nuestros  profesionales, que mañana, ya egresados, deberán resolver los problemas de nuestra sociedad.

-Marcelo Falappa (Computación):

   Las imagino mejores, más modernas, más adaptadas a estos nuevos formatos. Sin duda, si se puede superar la pandemia, creo que todas las instituciones educativas cambiarán para mejor.

-Pablo Badr (Ciencias de la Salud):

   Hay distintos ejes a tener en cuenta. Principalmente considerar que existe un cambio de paradigmas y que la utilización de TICS (Tecnologías de Información y Comunicación) ha tenido una implementación mucho más acelerada de lo esperable sin este contexto. La educación no presencial vino para quedarse.

   Por otro lado, existe un replanteo sobre las modalidades de evaluación, su lugar en el proceso de enseñanza-aprendizaje, su validez, confiabilidad y pertinencia; por lo cual seguramente la pandemia influya también en este aspecto. Finalmente, a nivel de la UNS, el cogobierno estudiantil ha cobrado aún mayor protagonismo, lo cual debería tener un impacto a largo plazo en las relaciones entre los distintos claustros, y ello debería traducirse en un proceso de fortalecimiento institucional.

-Pamela Tolosa (Derecho):

   Creo que somos incapaces de imaginar el escenario post pandemia. El cambio social será muy grande en cuanto a algunos hábitos que teníamos muy arraigados, al menos durante el primer período, aunque probablemente se diluya con el transcurrir del tiempo. Pero en este momento, es muy incierto el escenario. Lo único claro es que nos afecta a todos y todas. 

-Sheldy Ombrosi (Matemática):

   Imagino que muchos cambios que estamos implementando no sólo en la Universidad, sino en la sociedad en general y en la educación en particular, llegaron para quedarse. De cualquier manera creo que los procesos de mejoras reales de las diferentes cosas llevan su tiempo, no creo que luego de la pandemia todo sea ideal. 

   Sin duda que ciertos prejuicios que pudieran haber con la educación a distancia ya no estarán; también es cierto que al implementar esta modalidad de enseñanza aparecen problemáticas o inquietudes que si no lo hubiéramos hecho, tal vez de antemano no las hubiéramos analizado.

 

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