"Me suicido si muestra el video donde tengo sexo", le dijo Nahir Galarza al fiscal

Redacción de La Nueva.

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   Nahir Galarza, que está acusada de matar a su novio Fernando Pastorizzo, le hizo una dura advertencia al fiscal de la causa.

   "¿Es necesario que muestre ese video? ¿Por qué lo quiere mostrar? Si usted muestra ese video va a ser el responsable de que yo me suicide", le dijo la joven de 19 años al fiscal Rondoni Caffa.

   La chica hizo referencia a una filmación que la querella propuso exponer para demostrar su relación con su exnovio.

Qué pasó

   Jorge Reyes, un perito de Gendarmería Nacional, declaró que investigó los celulares de la pareja y exhibió parte del material fotográfico que se obtuvo del intercambio de mails.

   Luego, el querellante Juan Carlos Peragallo pidió mostrar un "video íntimo" que fue obtenido en esta pericia, con la intención de reforzar que existía un vínculo entre la joven y la víctima.

Una amiga de Nahir Galarza reconoció en el juicio que le pegó a Fernando Pastorizzo

   Sin embargo, la solicitud no fue aceptada por parte del Tribunal porque los jueces entendieron que no era necesario.

   De acuerdo al diario El Día, pese a la negativa de la difusión del video, Nahir se quebró y su abogado pidió que se retirara de la sala.

Otros testimonios

   Una vecina de Galarza, María Inés Correa, declaró en el juicio que Fernando había sido agresivo con la acusada y que la madrugada del crimen lo vio a él con un arma de fuego. Según su testimonio, Pastorizzo obligó a la joven a subir a la moto en la que se fueron del lugar.

   Tras la declaración de la testigo, los abogados querellantes Roberto Virué y Juan Carlos Peragallo pidieron al tribunal que la imputen por falso testimonio, ya que consideraron que la mujer se enredó en una serie de contradicciones.

   También habló Joaquín Osorio, el joven de 18 años que era amigo de la víctima pero también fue su novio durante un año. El testigo reveló un detalle de la noche en la que murió Pastorizzo: contó que cerca de las 5:40, él vio a Galarza entrar a su casa con "una sonrisa extraña, media burlona" y que llevaba algo en la mano pero no pudo precisar con exactitud de qué se trataba. (TN y La Nueva.)