Bahía Blanca | Viernes, 19 de abril

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San Isidro: los parques costeros y una isla atrapan a turistas

 Entre los cinco parques se destaca la reserva municipal Rivera Norte y las históricas barrancas, con múltiples atractivos histórico-culturales.

   Unos 300.000 turistas por año visitan la ciudad bonaerense de San Isidro, según las estadísticas de la Oficina de Turismo local, para conocer, además de sus tradicionales atractivos turísticos histórico-culturales, los cinco parques costeros que se han ido desarrollando en los últimos años, y una nueva isla que se incorporó al municipio.

   Ubicada a 30 kilómetros de la Ciudad de Buenos Aires, la comuna cuenta con al menos cinco parques costeros, entre los que se destaca la reserva municipal Rivera Norte y las históricas barrancas donde está la quinta Pueyrredón, Los Ombúes, Bosque Alegre, y desde enero, la Isla de San Isidro, un banco de arena consolidado que ya se sumó al partido, dijo la secretaria de Medio Ambiente local, Bárbara Gasparri.

   "La isla de seis hectáreas ya forma parte de San Isidro, como todo lo que se pueda formar en el futuro y se consolide una vez que los juncales dejen paso a los matorrales ribereños", precisó.

   Respecto de la reserva municipal Rivera Norte, Gasparri destacó que recibe por año de 25.000 a 30.000 visitantes, de los cuales 6.000 a 7.000 son estudiantes primarios o secundarios.

   Una de las principales actividades en el lugar es el avistaje de aves, ya que hay 1.300 metros de observatorio frente a la laguna donde viven 218 especies, como el Hocó Colorado, el pato, la garzas y los cormoranes, entre otros. 

   Los sábados, domingos y feriados se realizan visitas guiadas gratuitas desde las 16, que pueden extenderse por unos 90 minutos, con un recorrido por los senderos peatonales y conocer el vivero de plantas nativas.

   Las autoridades municipales tienen previsto en estos días la elaboración de una nueva guía de aves autóctonas, con explicaciones y comentarios que se entregará a los visitantes. Agregó que en la reserva se dictan "talleres de cultivo solo de plantas rioplatenses, que totalizan 260 especies, cuyo producto se utiliza para forestar los barrios vecinos".  Este fin de semana se realiza desde el club municipal, una salida de canotaje como parte de los festejos de San isidro Labrador, el santo patrono de la ciudad, que se conmemora cada 15 de mayo.

   "En la plaza principal de la comuna se realizará el fin de semana la tradicional kermese de San Isidro Labrador con juegos para toda la familia, y donde los premios serán plantas y juguetes, mientras que el martes se llevará a cabo la misa en honor al santo patrono, en su imponente catedral", agregó la funcionaria.

   Por su parte, la coordinadora de la oficina de Turismo local, Lucía Dominguez, dijo que recibe 25.000 visitantes por mes en sus puestos de información al turista, lo que permite armar una proyección de 300.000 turistas por año, solo en los puestos de atención al público, sin contabilizar aquellos que van sin pasar por esa repartición.

   La funcionaria destacó la importancia de la reserva costera Ribera Norte y la próxima creación de un nuevo parque municipal, donde hoy está el puerto, donde hay un importante corredor gastronómico que se extiende hasta la estación náutica, y que sumará superficie a las áreas protegidas del partido.

   Además de estos nuevos atractivos, San Isidro cuenta con un casco histórico muy interesante, donde destacan las barrancas; Villa Ocampo --donde vivió la escritora Victoria Ocampo--; la quinta Pueyrredón; y la quinta Los Ombúes; todo convertido en museos con impresionantes historias para conocer y múltiples actividades culturales para disfrutar, detalló.

   Domínguez destacó la importancia de los fines de semana largos para la zona, tiempo en que gran cantidad de familias van a recorrer las arboladas calles, se asombran por las antiguas casonas, y pasean por la costa para disfrutar de los nuevos parques costeros. Como dato curioso, en la ribera, para el lado de Beccar, los visitantes se topan con un singular monumento dedicado a los 33 orientales, aquellos que partieron de ese lugar para cruzar el Río de la Plata y enfrentar, en 1825, a los brasileños que habían invadido la entonces provincia Cisplatina, hoy Uruguay.