Bahía Blanca | Viernes, 29 de marzo

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Favaloro, por Bahía

por Mario Minervino

Hace 30 años, en febrero de 1972, pasó por Bahía Blanca el médico René Gerónimo Favaloro, durante cuya estancia aprovechó para opinar sobre algunas situaciones que, a su juicio, debían ser corregidas y atendidas de inmediato.
Poco puede decirse de este médico, trágicamente desaparecido en 2000, que desarrolló una técnica coronaria que fue adoptada en todo el mundo sumando a su quehacer su intenso amor por el prójimo y una preocupación constante por señalar las carencias y necesidades sanitarias del país.
Favaloro explicó, a su paso por Bahía, que el significativo aumento de enfermos cardíacos en el país se debía a que la vida había cambiado. 
Pero, sin dudas, el tema que más preocupaba al facultativo en 1972 era el problema médico asistencial que padecía el país, motivado fundamentalmente por la “falta de planificación sanitaria”. 
El médico explicó la necesidad de realizar un estudio para saber qué especialidades médicas se necesitaban y luego requerir ese número estricto a las Universidades. También apoyó el examen de ingreso a las casas de altos estudios. “No es posible -dijo- que se anoten 4 mil alumnos en una carrera y termine una tercera o cuarta parte. El país necesita urgente una reforma y una planificación universitaria”, concluyó.
Por último, se mostró conforme con el Sanatorio Güemes, destacando que no tenía diferencias con el de Cleveland, donde Favaloro se había desempenado hasta unos meses antes, y que ya se habían realizado cerca de 200 operaciones con resultados satisfactorios. 
Poco después de la entrevista, Favaloro continuó su viaje de vacaciones -acompañado por su esposa- a Bariloche. 
Su destino de vida sería de trabajo, conciencia y responsabilidad social. Su final aún golpea, en silencio, con bronca y con tristeza, la conciencia de todos los argentinos.