La pileta y la Escuela de Verano se transformaron en los lugares ideales

El predio SPIQPyA de General Cerri cuenta con piletas, quinchos, canchas, salones, amplios lugares arbolados, una cantina, fogones, baños recién estrenados y muchísimo espacio.

Allí, los hijos de los afiliados al Sindicato de Personal de Industrias Químicas Petroquímicas y Afines de Bahía Blanca disfrutan de un verano intenso, con recreación, compañerismo, deporte y mucha alegría.

También es un éxito la escuelita de verano SPIQPyA 2018.

El campamento y la noche extendida, un recuerdo para no olvidar.Un lugar ideal para nuestros hijos.

 

Conversando con distintos profesores de la colonia de vacaciones del SPIQPyA de Bahía Blanca, la encargada de trabajar con los chicos de 12 y 13 años sostuvo que "mujeres y varones trabajan juntos y además compartimos natación".

"Con el grupo de 10 y 11 años estamos en el grupo de Los Delfines, que es el nivel 2. Esta semana trabajamos sóftbol, la semana pasada vóleibol y la semana que viene será el turno de básquetbol", agregó.

La profesora contó que se trabajan "distintos deportes por semana para poder trabajar mucha técnica, se juega con los chicos y en febrero tenemos el campamento".

En momento que los chicos disfrutaban de un rico desayuno, la monitora detalló que en el sindicato se trabajaba con  más de 300 chicos.

"Tenemos mucho espacio libre para que disfruten, en la parte de gimnasia hacemos gimnasia acuática, también mucha natación que es lo que más disfrutan y la pileta libre, que es lo que ellos más le gusta", expresó.

Otro de los profesores de la colonia de químicos y petroquímico de General Daniel Cerri, dijo tener a cargo más de 300 chicos.

"En mi caso personal tengo a los chicos del grupo más grande  (de 12 a 13 años). Por suerte, nos vienen tocando días lindos", señaló.

"La Profe" detalló que los chicos "arrancan a las 9, realizamos actividades acuáticas dentro de la pile, después pasamos al desayuno y de ahí  vamos a los diferentes deportes. Esta semana también tocó sóftbol y después volvemos a pileta libre para ya cerca de las 12 retirarnos".

 

Los profesores de la colonia sostiene que "lo primero que les genera a los chicos al estar en la escuelita de verano es la cuestión de divertirse y de recrearse. Por otro lado, aprenden a trabajar en equipo, a respetar ciertas normas, a entender que hay una cierta organización para poder trabajar en conjunto, para poder entender las actividades y las diferentes reglas que componen la actividad. Además, aprenden conocimientos de ciertos deportes con la etapa de adaptación o iniciación deportiva y luego con lo que es la parte recreativa".

Al mismo tiempo, sobre la adaptación de los chicos cuando se acercan a la colonia, otro de los profesores comentó que "tratamos de hacer un diagnóstico de las habilidades o las cosas que aprendieron en años anteriores. En el caso que hayan participado por primera vez en este verano tratamos de plantear las diferentes actividades y la progresión de las mismas pautando diferentes objetivos".

"A lo largo de lo que es la Colonia, tratamos de trabajar diferentes tipos de deportes para tener en cuenta ciertas progresiones respecto de lo manipulativo y otras actividades en conjunto con los compañero. A lo largo del verano vemos ciertos avances en todo lo que respecta a su coordinación, a los movimientos, a diferentes adaptaciones que venimos trabajando en pos al objetivo a cumplir", añadió.

La tarde extendida y el campamento fue un rotundo éxito, ya que compartieron, disfrutaron y tuvieron vivencias nuevas.

Los fogones, las historias, los juegos y el compañerismo llenaron de alegrías que difícilmente se puedan olvidar.

Así, chicos y también grandes disfrutan de un lugar ideal.