Bahía Blanca | Jueves, 18 de abril

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Preocupa la salud de las cuentas externas del país

Un informe de un organismo dependiente de la Universidad de Belgrano advierte sobre el deterioro.
Víctor Beker.

El deterioro del sector externo argentino “es cada vez más preocupante”, por lo cual la economía “se encuentra una vez más fuertemente expuesta a las vicisitudes de las finanzas internacionales”, de acuerdo con un informe difundido por la Universidad de Belgrano.

Según el Centro de Estudios de la Nueva Economía (CENE) de esa Casa de Estudios, entre enero y septiembre de este año se registró un déficit de la balanza comercial de 5.200 millones de dólares, mientras que, en igual período de 2016, el saldo había sido positivo en 1.865 millones de dólares.

“La reversión del resultado es atribuible a dos factores: la reactivación económica y el significativo atraso cambiario. Todo incremento de la actividad económica genera un aumento en las importaciones, por el componente importado de la mayor parte de nuestra producción. En paralelo, se registra un creciente atraso cambiario que alienta la importación y dificulta el avance de las exportaciones”, analizó el director del CENE, Víctor Beker.

De hecho, mientras las ventas al exterior crecieron apenas un 0,7% en el lapso mencionado, las compras externas treparon un 17,7%; el mayor crecimiento en las importaciones correspondió a vehículos automotores, con un 43,1%, indicó el reporte académico.

A juicio de Beker, “el creciente déficit comercial se ha de traducir en un incremento en el desbalance de cuenta corriente, que ya en el primer semestre del año totalizó 12.889 millones de dólares, casi equivalente al registrado en todo 2016: 14.533 millones”.

Sin embargo, observó que “este deterioro del sector externo no se ve reflejado en la posición de reservas del Banco Central, merced a que el creciente endeudamiento del Tesoro genera un ingreso de divisas que va a parar a las arcas de la entidad monetaria”.

“El mercado internacional de capitales se torna así decisivo para hacer frente a los déficits gemelos: el del sector externo y el de las cuentas fiscales. La economía argentina se encuentra así una vez más fuertemente expuesta a las vicisitudes de las finanzas internacionales”, añadió el directivo.

Por otra parte, Beker consideró “llamativo que el propio Presupuesto Nacional para 2018 admita un déficit comercial de 6.000 millones de dólares. La Argentina es un país deudor, por lo que debería tener superávit comercial y de cuenta corriente para hacer frente a los pagos de intereses”.

“Por el contrario, el déficit comercial implica que la deuda deberá incrementarse, no sólo para hacer frente al pago de intereses, sino también para cubrir el desbalance mercantil sin perder reservas del Banco Central”, alertó.

A juicio de Beker, “el creciente déficit comercial se ha de traducir en un incremento en el desbalance de cuenta corriente, que ya en el primer semestre del año totalizó U$S 12.889 millones, casi equivalente al registrado en todo 2016: 14.533 millones”.

Sin embargo, observó que “este deterioro del sector externo no se ve reflejado en la posición de reservas del Banco Central, merced a que el creciente endeudamiento del Tesoro genera un ingreso de divisas que va a parar a las arcas de la entidad monetaria”.

“El mercado internacional de capitales se torna así decisivo para hacer frente a los déficits gemelos: el del sector externo y el de las cuentas fiscales. La economía argentina se encuentra así una vez más fuertemente expuesta a las vicisitudes de las finanzas internacionales”, añadió el directivo.

Por otra parte, Beker consideró “llamativo que el propio Presupuesto Nacional para 2018 admita un déficit comercial de 6.000 millones de dólares. La Argentina es un país deudor, por lo que debería tener superávit comercial y de cuenta corriente para hacer frente a los pagos de intereses”.

“Por el contrario, el déficit comercial implica que la deuda deberá incrementarse, no sólo para hacer frente al pago de intereses, sino también para cubrir el desbalance mercantil sin perder reservas del Banco Central”, alertó.

El Presupuesto prevé un incremento del endeudamiento en 47.000 millones de dólares durante 2018, lo cual llevaría la deuda pública con el sector privado y los organismos internacionales a 201.000 millones de dólares, estimó el CENE.