Bahía Blanca | Miércoles, 24 de abril

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El bombero de Luro que subió el rascacielos más alto de Latinoamérica

"Para ser bombero hay que estar medio loco y esta locura me gustó", dijo Silvio Flocco. Ascendió con un uniforme de 23 kilos.
Fotos: Gentileza Silvio Flocco.

   Anahí González
   agonzalez@lanueva.com

   “Para ser bombero hay que estar medio loco y esta locura me gustó”, dijo Silvio Flocco tras subir con su uniforme de 23 kilos- los 1800 escalones del edificio Torre Costanera, el más alto de Latinoamérica.

   Lo hizo en el marco de un evento que tuvo lugar el pasado fin de semana en Santiago de Chile y en el que participaron 800 voluntarios -entre ellos, solo 26 argentinos- con el fin de fomentar la donación de órganos.

   La campaña Corremos por la Vida fue organizada por segunda vez por la agrupación Héroes del Corazón, que se dedica a prevenir los infartos cardíacos en bomberos voluntarios a través de planes de entrenamiento y alimentación.

   Ni bien Flocco se enteró -por unos amigos bomberos de Trenque Lauquen- que existía esta competencia, no lo pensó dos veces. Le dijo a su esposa Daiana: ¡Vamos! Y allá fueron.

   Las inscripciones habían cerrado el día anterior pero lo dejaron anotarse. Dos semanas más tarde, subió a la familia al auto y partió a Chile (con un alto en Mendoza) con el desafío de subir los 62 pisos de esta enorme mole por una noble causa.

   El voluntario contó que ni bien llegó a Santiago, un par de días antes de la competencia, se acercó hasta el edificio para ver qué tan alto era.

   "No terminaba nunca de mirar para arriba. Era impactante”, contó.

   Sin embargo, en ningún momento achicó.

   La mayor emoción fue cuando en la largada de la competencia, antes de subir el primer escalón, le colocaron en el casco la imagen de un paciente en lista de espera para la donación de órganos.

   Estaba tan entusiasmado y excitado que olvidó prender la cámara que había llevado para filmar el ascenso.

   “Largué a las 12 y empecé tranquilo. Frené cuatro veces en la subida para recuperar aire y seguir avanzando”, dijo.

   En mitad de la competencia le realizaron un control médico, con control de pulso: ¡tenía 156 pulsaciones por minuto!

   Tardó 25 minutos y 42 segundos y obtuvo el puesto 332 -de entre 800- en la competencia general y 20 en su categoría.

   “En un momento sufrí un poco la escalera pero con la experiencia de escalada que tengo y por el poco tiempo de entrenamiento con el que conté me pareció algo fantástico. El año que viene ¡vuelvo!”, expresó.

   "En Pedro Luro había entrenado mucho ¡Me la pasé subiendo y bajando edificios!”, bromeó haciendo referencia a que el pueblo del distrito de Villarino cuenta solo con casas bajas (salvo el Hotel de Fortín Mercedes, de 4 pisos, donde entrenó tres días).

   Más allá del buen sentido del humor, Flocco reconoció que debió ponerse a tono para la competencia para lo cual contrató al entrenador bahiense Carlos Carrizo.

   De un día para otro, pasó de correr 6 kilómetros -con paradas cada dos- a realizar 10 kilómetros diarios, muchos abdominales y una dieta especial.

   Su esposa salió a correr con él y estuvo pendiente de cada detalle del plan de alimentación. ¡Hubo equipo!

   Voluntario. Silvio Flocco es bombero en el cuartel de Pedro Luro desde hace 27 años. Su hermano, Luciano Flocco, es Jefe del Cuerpo Activo y fue uno de los que participó del homenaje que el presidente Mauricio Macri organizó en la última edición de la Rural de Palermo en la que reconoció la labor de los voluntarios durante los incendios que tuvieron lugar entre diciembre y enero pasado en la zona y que arrasaron con miles de hectáreas.

   El viaje. Flocco llegó a Santiago de Chile unos días antes de la competencia acompañado por su esposa Daiana y sus hijos Gino y Valentino de un año y medio y tres, respectivamente. Del evento participaron otros 26 bomberos de Argentina.

   El cuartel. La Comisión Directiva del cuartel de Pedro Luro acompañó la iniciativa de Flocco no solo porque tenía un fin solidario sino con la idea de estrechar lazos para que luego los bomberos puedan viajar a capacitarse en Chile. “Es importante para nosotros conocer cómo manejan las herramientas los bomberos de otros países. Eso nos aporta una nueva perspectiva. En Argentina tenemos cursos y capacitaciones pero abrir el abanico y ver cómo trabajan en otros países es un importante aporte”, expresó.

   Satisfacción. “Lo lindo de estas competencias es que cuando terminás te sentís satisfecho, muy bien espiritualmente, reconfortado y bien físicamente, más allá del cansancio. Con entrenamiento lo podés lograr, no como alguien que esté entrenado específicamente para esto, pero a tu ritmo podés llegar igual", destacó.

   Héroes del Corazón. Es un proyecto del Cuerpo de Bomberos de Santiago, con el respaldo del Departamento Médico, para introducir pequeños cambios en el estilo de vida de los voluntarios y prevenir infartos. El valor de inscripción de cada bombero se destinó a la Corporación del Trasplante, para contribuir en la promoción del trasplante de órganos.