Salvó a sus padres del monóxido de carbono porque "algo había aprendido en un curso"
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Un nene de 11 años contó hoy que salvó a sus padres intoxicados ayer con monóxido de carbono, en su casa de la primera cuadra de Patagones, en Villa Muñiz.
“Abrí las ventanas, apagué todos los calefactores y llamé al 911 —dijo Ignacio Ávila—. Me asusté al ver a mi mamá en el piso.”
El nene contó que al llamar al teléfono de emergencias dijo que los 3 se sentían mal, como decaídos y que le dieron instrucciones de ventilar y apagar la calefacción.
“Ya lo había hecho. Había aprendido algo en un curso de RCP [resucitación cardiopulmonar]”, dijo.
Sus padres Jorge Ávila y Silvia Aravena debieron recibir asistencia médica.
“Fue un susto con suerte. Si nos desmayábamos, no la contábamos. Gracias a mi hijo que llamó al 911”, dijo Jorge.
“Lo podrían hacer todos, porque así ayudarían a los que quieren”, agregó Ignacio.
Otros casos
Desde que empezó el frío, en mayo, se reportaron al menos 5 casos bahienses de intoxicación con monóxido de carbono.
Una joven de 26 años sintió mareos y náuseas en su casa de Universitario y debió ser hospitalizada.
4 personas fueron afectados por el mal uso de una salamandra, en Vélez Sarsfield al 3.900.
Una mujer fue trasladada a un hospital desde su casa del macrocentro.
Qué es el monóxido de carbono
El monóxido de carbono es un gas que se produce por la mala combustión del gas natural, leña, carbón, nafta, querosén y otros combustibles.
Es potencialmente mortal ya que es inodoro, incoloro y no irritante y las personas que lo inhalan no se dan cuenta que se están intoxicando.
Las estadísticas demuestran que la mayoría de las personas que fueron afectadas o fallecidas, sufrieron la intoxicación durante las horas de descanso, y ni siquiera fueron conscientes de ningún malestar previo.
Consejos
La Comuna difundió algunas recomendaciones para evitar intoxicaciones.
* Ante la presencia de malestar general -dolor de cabeza, náuseas, mareos, embotamiento, falta de fuerza o debilidad muscular, somnolencia- sin causas aparentes, ventilar rápidamente el ambiente y dirigirse a la unidad sanitaria o centro de salud más cercano.
* No instalar el calefón en el baño o lugar de descanso. Si ya lo tiene instalado, es conveniente reubicarlo.
* Revisar quemadores y salidas al exterior de calefones, estufas, calefactores y hogares. La llama amarilla es indicadora de mala combustión, y por lo tanto productora de monóxido de carbono.
* Si usa estufas a querosén, gas licuado o braseros, apagarlos y sacarlos de los ambientes habituales antes de dormir.
* Ventilar permanentemente los ambientes. (Video: canal 7, LU2 y La Nueva.)