Bahía Blanca | Jueves, 28 de marzo

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San Francisco, frente a un dilema que perjudica su rol contenedor

Insertado en un sitio neurálgico de la ciudad, la entidad brinda formación y contención a casi 200 chicos y adolescentes. Pero esa labor peligra...
Las formativas de San Francisco ya entraron en la parte final de una dura temporada pero con interesantes resultados.,

Fabián Rodríguez

farodriguez@lanueva.com

Desde hace seis años, el club San Francisco le dio vida al predio del Hospital Penna, ubicado entre las calles Misiones, Láinez y San Lorenzo, que estaba completamente abandonado. Desde entonces, unos 300 chicos despuntan el vicio de la pelota, aunque el sueño de la entidad “santa” de seguir refaccionado y mejorando el lugar podría quedar trunco. Sencillamente porque se les comunicó que no le renovarían el convenio.

Jorge Dambolena –presidente del “Sanfra”— se mostró preocupado y reclamó por la continuidad del trabajo formativo en la zona, incluso con obras proyectadas en un futuro no muy lejano.

“Hace unos cuatro meses nos avisaron que tenemos que dejar el lugar. Y estamos amargados porque invertimos mucho tiempo y dinero en mejorar el predio. Incluso, hicimos una gran inversión para contar con el riego automático y el año pasado lo instalamos con el objetivo de sembrar la cancha en un futuro inmediato. Nos costó cerca de 80 mil pesos”, se lamentó la cara visible de San Francisco.

“Tuve una reunión con la gente de la Dirección del Penna y les cuestionamos por qué esperaron que hiciéramos semejante inversión para que nos dijeran que nos tenemos que ir. Les pedí que me mandaran una carta documento que nunca me llegó”, amplió.

-¿Tuvo alguna respuesta del Municipio?

-Estuve en la Minicipalidad, pedí una reunión con el intendente y me atendieron los secretarios. De cualquier manera, Rodrigo Dulsan (Asesor de Tierras y Escrituras del Municipio) se comprometió muchísimo a ayudarme y se está moviendo para darnos una solución.

“Justamente el próximo lunes tengo una reunión con la gente de la comuna para delinear la situación y cómo seguir. Pero nos urge tener una decisión, porque no podemos avanzar en el predio ni empezar de cero en otro lugar. A pesar de que no es un tema sencillo de resolver, ese lugar es el más conveniente para nosotros porque creemos que aún se puede hacer muchas cosas”, añadió.

-¿Le indicaron para qué quieren utilizar el predio?

-Me dijeron que lo iban a utilizar como un helipuerto. Y nosotros no somos cerrados, todo lo contrario; porque tranquilamente pueden aterrizar arriba del césped.

Un poco de historia

“Cuando desembarcamos en el predio, estaba totalmente abandonado. Nos llamaron de la Municipalidad para ver si lo queríamos agarrar, porque la gente del club Penna no seguía más. Fue un convenio por un año y lo fuimos renovando sucesivamente año tras año”, recordó.

“Al tercer año, pedimos estirar el convenio para hacer trabajos más importantes, pero lo rechazaron", amplió.

Dambolena relató que mucha gente se comprometió a extenderle los plazos, pero todo quedó en la nada.

“Cuando se encontraba el doctor Comesaña (César) a cargo de la dirección del Hospital Penna, trabajamos mucho para extender el plazo del convenio. Incluso, empezamos con los trámites gubernamentales. Participó mucha gente de la Provincia que nos decían que nos iban a ayudar a pelear por esas tierras y los edificios abandonados, pero lamentablemente nunca se concretó”, lamentó.

“Nosotros siempre estuvimos decididos a quedarnos con el lugar por la seguridad que nos da como ámbito de contención para los chicos. Además, hay salas que están abandonados donde muchos pibes lamentablemente se juntan a drogarse y podríamos darle mucha utilidad conjuntamente con los padres”, señaló.

Dambolena también destacó las mejores que se realizaron en el predio.

“El tema de las cloacas y el agua es caótico. Sobre la calle Misiones hasta San Lorenzo se tapó todo. Y nos tomamos el trabajo con la gente de ABSA de limpiar cada boca de cloacas. Nadie si hace cargo de nada. Además, un caño estuvo roto durante dos años y lo solucionamos. Por eso, queremos que valoren todo el esfuerzo que hemos realizado”, reclamó.

Finalmente, Dambolena pidió apelar al sentido común.

“Queremos mejorar el predio e iluminarlo, pero siempre y cuando no nos digan de un día para el otro que nos tenemos que ir. La Casa Mc Donald’s hizo un convenio por 40 años con una de las salas abandonadas, donde hoy es un lujo. Y nosotros pedimos algo similar, como tampoco tenemos problemas que nos impongan una serie de compromisos a cumplir”, aclaró.

“Y por más que nos proporcionen un predio de 20 hectáreas, nos tienen que construir la cancha, los vestuarios, la utilería y los baños. Y eso significaría un gasto enorme. Por eso, creemos que lo mejor es quedarnos en el lugar donde estamos”, se ilusionó.