Bahía Blanca | Jueves, 28 de marzo

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La esquina más accidentada está por batir su propio récord

La estadística la coloca año a año en el tope de la lista de colisiones viales en Bahía. En lo que va de 2017 ya se igualó la cifra total de choques ocurridos en 2013, la peor temporada.
El problema no se resuelve con semáforos ni lomos de burro sino con un tratamiento integral de la avenida, afirmó el especialista Pedro Silberman.

Mario Minervino

mminervino@lanueva.com

Así como estacionar en lugares indebidos sigue siendo por lejos la falta más sancionada a los conductores bahienses (1.400 actas de infracción en mayo), el cruce de la avenida Colón con Brown-Vieytes mantiene su prevalencia como el que más accidentes registra cada año.

No solo eso: las 10 colisiones en lo que va de 2017 ya igualaron el récord establecido en 2013, anque la diferencia es que en el último caso se toma el año entero.

La cantidad duplica a la segunda esquina con más accidentes, también en Brown, en su cruce con Villarino.

En el otro extremo, mejoraron su situación otras dos intersecciones peligrosas como las de Alem y Córdoba, y Zelarrayán y Cuyo, que disminuyeron drásticamente su estadística: ninguno en el primero caso, uno en el segundo.

En este año (hasta el 31 de mayo) se registraron en la ciudad 1.112 accidentes, de los cuales el 40% requirió internación hospitalaria.

La cantidad es apenas menor a 2016 y 2015 para el mismo período (1.183 y 1.178, respectivamente), lo cual revela en parte que las medidas implementadas en materia de tránsito no permiten observar una baja sensible de problemas.

Un plan

"No esperes resultados diferentes si siempre haces lo mismo". La frase del físico Albert Einstein puede aplicarse al tránsito local. Las mismas calles, los mismos semáforos y la misma (mala) cultura de los conductores son algunos componentes que permiten inferir que no hay nada nuevo bajo el sol.

Aún se carece de una planificación integral. Se advierten intervenciones nuevas --ciclovías, franjas para carga y descarga, carril para los ómnibus, prohibición de estacionar--, pero cada una genera consecuencias no previstas y, en ciertos casos, negativas.

El médico Pedro Silberman, titular del Grupo Interdisciplinario para el Estudio de la Colisión Vial de la UNS, refirió a "La Nueva." el caso de las arterias en las cuales se interviene, por ejemplo, colocando lomos de burro o semáforos, lo cual provoca que los conductores eviten esa calle y recurran a una paralela que les ofrezca fluidez, generando así nuevos conflictos en otras calles.

"Bahía Blanca tiene una mala planificación y nada va a mejorar mientras los especialistas no se reúnan a a pensar mejores circuitos, a proponer las mejores circulaciones", señaló.

Acerca de Colón y Brown-Vieytes, dijo que el inconveniente es consecuencia de esa mala planificación. "No se resuelve con una intervención en el lugar, sino tratando de mejorar el funcionamiento integral del área, un pensamiento sobre el uso de la avenida", indicó.

Finalmente agregó que no tiene claro si a fines del semestre presentará su habitual informe de accidentología al municipio, luego de que no se renovara el contrato ni se pagaran los honorarios de los últimos meses. "El acuerdo está a la firma del intendente desde hace meses. Pero nadie nos confirma la continuidad", dijo.

También alertó sobre el futuro de los datos aportados por el 911. "Desde que la central dejó de la ciudad no tenemos certeza de cómo va a estar la información. Ni siquiera si estará disponible".