Deguer trazó un crítico panorama en la salud

Redacción de La Nueva.

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Cecilia Corradetti

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El sistema de salud se encuentra estancado y sin que por el momento se avizoren mejores perspectivas: déficit de especialistas críticos, salarios insuficientes, violencia en los hospitales, burocracia y falta de actualización de las obras sociales atentan contra una profesión que se ha ido degradando.

Así lo reconoció el doctor Carlos Deguer, titular de la Asociación Médica de Bahía Blanca (AMBB), quien insistió en que por el momento “no hay un horizonte o algo que nos haga pensar que la situación podrá revertirse en lo inmediato”.

--¿No hay suficientes médicos?

--Hay especialidades críticas y guardias generales que cuesta muchísimo cubrir. Esto no encuentra una solución y, por el contrario, se agudiza si se tiene en cuenta que ahora las guardias son de 12 horas, por lo tanto se duplica la cantidad de médicos necesarios en sanatorios y hospitales. La demanda de profesionales a veces excede la cantidad disponible y, por otro lado, no todos hacen guardias. Por ejemplo, los que llegan a cierta edad.

--Y hay otros factores...

--Sí. Los riesgos de la atención médica son cada vez mayores. Las situaciones de violencia, el temor a equivocarse, los juicios por mala praxis, son variables a considerar. Además del trastorno de conseguir médicos críticos, también se complica para especialidades básicas.

--¿Cómo se vive la violencia en los hospitales?

--En el área de Neonatología del Hospital Penna se autorizó la custodia policial durante 12 horas por la seguidilla de amenazas y otras situaciones difíciles de manejar. Así sea violencia verbal, el personal necesita sentirse seguro.

--¿Alguna situación puntual rebalsó el vaso?

--Uno de los últimos episodios afectó a una médica de guardia de Neonatología con ocho meses de embarazo. En ese momento eran cinco, entre enfermeras y médicas, y la situación se puso “pesada”. No hay por qué tolerarlo. Elevamos un pedido a dirección y se autorizó una custodia, que la llevan a cabo policías locales y de la Provincia. Quisiéramos una guardia las 24 horas, pero sabemos que es imposible.

--¿Cuál es hoy el principal reclamo de la AMBB?

--La cuestión de los honorarios sigue siendo compleja. Seguimos solicitando aumentos que reflejen el incremento de vida. Además, la presión fiscal se volvió insostenible. A un médico con buena cantidad de consultas le quitan un tercio de su ganancia desde el Estado.

--¿Con los reemplazos de guardias sucede lo mismo?

--Es un ejemplo claro. Aquel profesional que desee hacer un reemplazo de guardia para ganar un dinero extra, tiene que saber que esa “quinta” guardia del mes será gratis: se la descuenta el Impuesto a las Ganancias. Estos desfasajes que venimos peleando desde hace tres o cuatro años distorsionan todo el sistema. Administrativamente hay que hacer “malabares” para cubrir estos aspectos y que el profesional no trabaje gratis.

--¿Cómo se encuentran las clínicas privadas?

--En un estado muy delicado. Todas trabajan a pérdida. Algunas más complicadas que otras, pero muy afectadas porque los gastos son mayores que los ingresos.

--¿PAMI está cumpliendo en tiempo y forma?

--Sí, pero en medio de una gran imprevisibilidad producto, entre otros factores, de los cambios y recambios de autoridades. Ahora, por ejemplo, cambiaron nuevamente los mecanismos de pago en cuanto a internación y volvió todo para atrás. Es cansador porque debemos adaptar todos los mecanismos según el cambio de humor de cada funcionario.

--¿La gran preocupación es la falta de médicos de cabecera?

--Sí. Muchos se han “borrado” y no hay suficientes para la cantidad de abuelos de la ciudad. Es decir, de un total de 50 médicos, al menos 20 quedaron afuera del sistema y en consecuencia unos 8 mil afiliados carecen de esta cobertura. Ahora deben atenderse en el sistema público y eventualmente en las guardias, mientras que las recetas se expenden en la sede de PAMI.

--¿En qué situación se encuentran los médicos que atienden por IOMA?

--Todavía discutiendo el aumento para este año, que depende de la Provincia, y es el mismo que les ofrecen a los maestros. Es decir, “en veremos”, por lo tanto muchos médicos no atienden a afiliados a esta obra social, la segunda más grande después de PAMI. Este es un problema histórico.